Después de 26 días, el líder estudiantil y preso político Max Jerez se enteró este miércoles, 13 de octubre, que su madre, Heydi Meza, falleció a causa de una neumonía, informó a través de un comunicado la Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN).
“Max hasta hoy (miércoles) pudo recibir la noticia del fallecimiento de su madre, Heydi Meza, así como los detalles de sus últimos momentos y funerales”, manifiesta el comunicado de AUN.
Horas antes de morir la madre de Jerez, su abogado, familiares y amigos solicitaron un permiso a las autoridades de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) para que el joven se despidiera de su madre, pero esto fue denegado por la dictadura de Daniel Ortega.
El líder universitario cumplió este miércoles 100 días de estar secuestrado por el régimen orteguista. El Ministerio Público, controlado por la dictadura, lo acusa de supuestamente ser autor del delito de «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional, en perjuicio de la sociedad nicaragüense y el Estado de Nicaragua».
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🇳🇮#100DíasSinLibertad| Compartimos lo más reciente sobre el estado de nuestros amigos, Lesther Alemán y Max Jerez, tras las rejas del régimen en el Chipote.
— AUN (@AUNNicaragua) October 14, 2021
AUN seguimos en esperanza y con resistencia para demandar la libertad de todo nuestro pueblo. pic.twitter.com/gJDt2JUjXY
Jerez y Alemán muestran mejoría
En el mismo comunicado, AUN informó que tanto Jerez como el líder universitario Lesther Alemán muestran “una leve mejoría” en su estado de salud y condiciones carcelarias, aunque continúa denunciando los intensos y constantes interrogatorios.
“Gracias a la constante presión y demanda de la ciudadanía nicaragüense, se permitió la visita de sus familiares este 12 y 13 de octubre. Sus familiares informan que hay una leve mejoría en el estado de salud y condiciones carcelarias de Lesther y Max. Alemán pudo recibir atención médica luego de haber presentado una situación de salud sumamente preocupante la última vez que se le vio”, comparte AUN.
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La última vez que las familias de los jóvenes los pudieron ver, fue entre el 31 de agosto y 1 de septiembre.
Aunque han presentado una pequeña mejoría, AUN denunció que la dictadura mantiene a los jóvenes bajo extenuantes interrogatorios, con las luces encendidas las 24 horas del día para interrumpir su descanso, así como otras formas de intimidación. Y demandaron que tengan en tiempo las visitas familiares, una alimentación adecuada, acceso a medicina, que se respeten sus derechos a la defensa y puedan ver a su abogado, pero sobre todo exigieron la libertad inmediata.
“El sueño de libertad, democracia y justicia es el sueño de todos los nicaragüenses y desde AUN estamos comprometidos con su construcción. AUN hay esperanza”, concluye el comunicado.