La presidenta del defenestrado partido político Ciudadanos por la Libertad (CxL), Kitty Monterrey, advirtió que aunque la comunidad internacional sigue ejerciendo presión sobre la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo «es poco lo que puede hacer», por lo que señaló que es a los nicaragüenses a los que les toca hacer la mayor parte, manteniéndose en resistencia dentro y fuera del país y para ello llamó a todo el exilio y diáspora de nicas en todo el mundo a unirse y presentarle al mundo un solo plan de acciones para lograr el derrocamiento del régimen de los Ortega-Murillo.
Monterrey apareció en San José, Costa Rica, el 10 de agosto brindando una entrevista en el Canal 7 de ese país, luego de haber logrado escabullírsele a las fuerzas represivas de la dictadura de Managua ante el peligro de ser encarcelada o deportada, como les ha sucedido a los más de 30 opositores que han sido detenidos en los últimos tres meses.
Noticia relacionada: Kitty Monterrey logró salir para Costa Rica tras la embestida de Ortega contra CxL
A quien era la representante legal de CxL la despojaron de su nacionalidad nicaragüense casi que de forma expedita y arbitraria, acción que ejecutó el orteguista Consejo Supremo Electoral (CSE) el mismo día que le arrebató la personalidad jurídica a esa agrupación política seis de agosto, con lo cual eliminó de la contienda electoral al último partido considerado de oposición.
La dirigente política ahora en el exilio, cuestionada por el entrevistador costarricense sobre el porqué pese a que ya habían inhibido a la candidata vicepresidencial Berenice Quezada, insistía en seguir participando en el proceso electoral respondió que pretendían lograr un voto masivo para poner en evidencia el fraude que preparan los Ortega-Murillo ante la comunidad internacional que de hecho, según sus palabras, lo que puede hacer, es muy limitado.
«¿Cuál era la alternativa? (a seguir en el proceso electoral) ¿El no hacer nada, el apagar la luz y el decir ya está? ¿Qué es lo que lográbamos con eso? Dejar a (Daniel) Ortega en el poder indefinidamente sin ninguna oposición que pudiera hacerle frente aún cuando entendíamos que nos estábamos enfrentando a algo que iba a ser un fraude posiblemente, de eso estábamos claros, pero la apuesta era un voto masivo que podía desenmascarar a la dictadura ante la comunidad internacional. Si alguien tenía una alternativa mejor, estábamos dispuestos, pero nadie nunca dio una alternativa y lo que puede hacer la comunidad internacional es bien limitado. Los nicaragüenses somos los que tenemos que aprender a resolver nuestros problemas», argumentó Monterrey.
Ahora busca unidad
La exrepresentante legal de CxL aseguró que lo primero que hará en la nueva coyuntura, cuando ya no cuenta con su «vehículo» como partido, es mantenerse firme impulsando la lucha cívica hasta donde nos lo permitan las leyes represivas de la dictadura.
«Nosotros tenemos que seguir presionando adentro del país manteniendo esta lucha. Tenemos que estar preparados para observar el fraude electoral que se va a dar en las elecciones de noviembre. Tenemos que hacer conciencia entre la comunidad internacional, sobre todo de que estamos logrando aglutinar en una sola posición de oposición a toda esta diáspora nicaragüense que está exiliada en diferentes partes del mundo», dijo.
Noticias relacionada: Ortega también acusa a exembajador Mauricio Díaz de «traición a la patria»
Agregó que «tal vez de una sola vez podremos decirle al mundo aquí estamos, unidos contra una dictadura y esta es nuestra estrategia y este es nuestro plan y vamos a seguir avanzando, porque no podemos simplemente estar dependiendo de todos y de lo que nos van a ayudar. Tenemos que ser nosotros mismos los que propongamos soluciones y que activamente participemos para derrotar a Ortega de alguna forma, pero se tiene que lograr».
Asimismo, Monterrey planteó la necesidad de relanzar acciones de resistencia cívica dentro del país, pero que están buscando una estrategia que permita no seguir arriesgando más vidas ni que haya más presos políticos.
«Claro que la puede relanzar (la resistencia cívica). La gran pregunta va a ser ¿Cómo relanzarla sin exponerse a que haya más presos? Porque la prioridad de todos, y aquí independientemente de qué opinión tiene cada quien, siempre la prioridad de todo el mundo ha sido la liberación de los presos políticos. Eso indiscutiblemente. Lo que queremos es que salgan y evitar que sigan deteniendo más gente, por supuesto. Entonces esa resistencia cívica es lo que tenemos que saber planificar, hacerlo bien hecho, de tal manera que no se arriesgue la vida o la integridad física de la gente que está en el país, pero que sirva realmente para mantener posiciones de fuerza contra Ortega».
Noticia relacionada: CxL demandará la restitución de su personalidad jurídica
La dictadura Ortega-Murillo ha descabezado a tres partidos políticos durante el el actual proceso electoral que ha preparado a su gusto y conveniencia. Eliminó las personalidades jurídicas del Partido de Restauración Democrática (PRD), con lo que desapareció toda posibilidad de participar en las elecciones a la Coalición Nacional, la plataforma opositora que se mostraba más beligerante frente al régimen.
Luego eliminó la legalidad del Partido Conservador (PC) y finalmente le dio la estocada a CxL y con ellos arrebató toda posibilidad de competencia en las urnas y todo quedó listo para que el matrimonio dictatorial Ortega-Murillo se reelija, Ortega por cuarto periodo consecutivo y su mujer Murillo por segundo.
Además, como parte de su estrategia para allanarse el camino hacia el fraude en las eventuales votaciones del siete de noviembre, a partid de finales de mayo, desató una ola represiva contra dirigentes opositores, llevando a la cárcel a al menos 33 activistas entre los que se cuentan siete precandidatos presidenciales, dirigentes políticos, campesinos y estudiantiles, empresarios y un periodista.