La Unidad Nacional Azul y Blanco (Unab) declaró, a través de un comunicado dado a conocer este 13 de julio, que, aunque no renuncia a una salida de la crisis política y social de Nicaragua a través de una vía electoral, sí rechaza el actual proceso que impulsa el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo porque no ofrece ni siquiera garantías mínimas de transparencia y está encaminado a mantener en el poder a los actuales dictadores.
El pronunciamiento de la organización política opositora, nacida al fragor de las protestas sociales de 2018, señala que, como organización política, buscan la salida de la dictadura Ortega-Murillo por la vía pacífica y estarían dispuestos a dar una batalla electoral en condiciones de limpieza y transparencia, pero no en el actual proceso electoral.
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«La Unidad Nacional (Azul y Blanco) es una estructura política que tiene como compromiso salir de la dictadura Ortega-Murillo por la vía cívica, pacífica y democrática que solo unas elecciones pueden permitir, es por eso que nos preparamos para competir en un proceso electoral limpio y transparente. Sin embargo, las elecciones actuales, previstas para el siete de noviembre, con jueces electorales adeptos y fieles al régimen, una legislación que favorece la alteración de la voluntad popular y con la mayoría de liderazgos y precandidatos secuestrados, están encaminadas a garantizar la continuidad de la dictadura en el poder», señala el pronunciamiento.
Asimismo, subrayan que, dentro de la UNAB consideran que participar del actual proceso electoral, bajo las condiciones establecidas por el régimen, carece de todo tipo de condición legal y constitucional que dé como resultado unas elecciones creíbles y legítimas, que devuelvan a la ciudadanía la esperanza de una nueva Nicaragua.
«Como Unidad Nacional reconocemos la vía electoral como la alternativa pacífica para salir de la dictadura, siempre y cuando se incorporen las demandas reales del pueblo nicaragüense, tal y como lo son: Libertad absoluta de todas las personas presas políticas. Elecciones libres, observadas y transparentes. y retorno de las garantías civiles y políticas», reza el pronunciamiento político.
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Asimismo, la organización Azul y Blanco exige al régimen el cese de la represión, la persecución contra los opositores y militarización en el país e insisten que deben darse reformas electorales que incorporen las recomendaciones de la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH).
«Reafirmamos que no rechazamos la vía electoral, rechazamos el (actual) proceso electoral viciado e impuesto por la dictadura. La Unidad Nacional continuará exigiendo un proceso con las condiciones habilitantes, que brinde el tiempo necesario para que las fuerzas políticas puedan concertarse y el pueblo tenga la oportunidad de elegir a sus autoridades» recalca la proclama de los azul y blanco.
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También adelantan que no van a dejar de exigir la liberación de las personas presas políticas, «entre ellos quienes se propusieron con mucha valentía como precandidatos y que están desaparecidos. Llamamos a la concertación y convergencia de todas las organizaciones de oposición, ya sean políticas o de sociedad civil, las organizaciones de víctimas, las organizaciones de la diáspora y el exilio para retomar el rumbo de la lucha cívica». El precandidato presidencial de la UNAB, Félix Maradiaga junto a altos dirigentes de esa organización se encuentran encarcelados desde hace más de un mes, acusados por la tiranía Ortega-Murillo de traición a la patria, de acuerdo con la ley represiva 1055 o Ley de soberanía.
Advierten que, con la escalda represiva que desata la dictadura desde hace más de un mes, en la que ha encarcelado a al menos 26 líderes opositores, «la dictadura demuestra el desprecio hacia la ciudadanía nicaragüense, al no demostrar una mínima voluntad política para resolver la crisis en Nicaragua. Mientras el desempleo y la carestía de la vida siguen en aumento».
El desprecio es hacía ustedes no hacía todo el pueblo. NO MANIPULEN.