La segunda al mando de la dictadura de Daniel Ortega y vocera gubernamental, Rosario Murillo dedicó su monólogo de este tres de junio para hablar de honestidad y hasta dio su propia definición de ese concepto moral asegurando que integridad es «por un lado, no malgastar lo que no es de uno y por otro lado, no promover discordias» en clara referencia al caso que su régimen impulsa contra la precandidata presidencial Cristiana Chamorro, a quien acusan de supuesto lavado de dinero y por lo cual, ordenaron inhibirla de aspirar a un cargo público tratando de apartar la amenaza que representa la hija de la expresidenta Violeta Barrios de arrebatarles el poder a través del voto popular el próximo siete de noviembre.
«Alrededor del cariño que nos debemos unos a otros, del respeto que nos debemos unos a otros, de la integridad. ¿Qué quiere decir integridad? No tocar los bienes ajenos, y sobre todo no dedicar tiempo, esfuerzo, energía para, por un lado malgastar lo que no es de uno y por otro lado, para promover discordia. El sentido de la vida es la concordia, es el continuo aprendizaje, es el crecimiento espiritual», dijo Murillo cuyo gobierno es señalado de desviar para beneficio personal y lucrar a toda su familia con al menos tres mil millones de dólares de la cooperación petrolera venezolana de la que en 14 años sigue sin rendir cuentas claras.
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Murillo dijo que Dios le da energía para seguir haciendo todo lo que hace desde el Gobierno y que todo lo que tiene es gracias al poder de Dios. «Decimos todos los días, gracias infinitas a Dios que nos da la capacidad de luchar de vencer desde el amor al prójimo mandato de nuestra fe y nuestros valores de cristianismo, fraternidad y solidaridad. Nosotros todos los días, sabemos que todo lo que somos, todo lo que tenemos todo lo que hacemos es gracias al gran poder de Dios», señaló.
Asimismo, la vicedictadora se refirió a la oposición y nuevamente a la acusación que promueve la Fiscalía y el Poder Judicial bajo las órdenes de ella y de su marido y mencionó que «somos hermandad, solidaridad, cristianismo, alegría, pueblo alegre el pueblo nicaragüense, porque reconocemos en la alegría el don de Dios que nos llena de energía para continuar construyendo las victorias de la paz, contra la miseria, los robos contra quienes quieren volver arrebatar lo que solo es de nuestro pueblo, o quisieran, porque ni pudieron ni podrán».
Mientras la vicedictadora Murillo habla de amor al prójimo, de concordia y bendición de Dios, ella y su marido han ordenado una ola de represión contra la oposición y persecución judicial contra opositores y periodistas independientes, tal es el caso de la arbitraria «casa por cárcel» policial que impone contra dirigentes opositores como Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro y Tamara Dávila, a los que no les permite salir de sus casas pese a que no existe ninguna restricción legal que le permita a la Policía bloquear la salida, en sus propias residencias, de los dirigentes antisandinistas.
En una reciente entrevista con medios de comunicación nicaragüenses en el exilio, el exmagistrado de la Corte Suprema de Justicia Rafael «Payo» Solís, quien fuera uno de los principales asesores de la pareja dictatorial, confesó que los operativos contra altas personalidades de la oposición o de medios de comunicación, tal es el caso de los operativos contra el Canal 100% Noticias, el allanamiento contra Confidencial o el arresto de Lucía Pineda Ubau y Miguel Mora, son operativos dirigidos personalmente por Daniel Ortega y Rosario Murillo, quienes no le dan cuenta a nadie de sus decisiones sino hasta que ya están en marcha o ya han sido ejecutadas. Es por ello que opinadores consideran que la orden de allanarle la vivienda y arrestar a la precandidata Cristiana Chamorro tiene que haber sido orden directa del matrimonio dictatorial y el operativo podría haber seguido una direccional en tiempo real por vía telefónica por ellos mismos.
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Además, la Fiscalía orteguista ha citado a interrogatorios a al menos una veintena de periodistas independientes, directores y propietarios de medios de comunicación, en torno al caso de acusación contra Cristiana Chamorro, la Fundación Violeta Barrios a quienes señala de supuesto lavado de dinero, asunto que es visto como una «mampara» para disfrazar la intención de sacar del juego electoral a la exdirectora de esa Fundación porque es la precandidata presidencial que representa mayor peligro para ellos.
«Aquí está Dios, aquí está Cristo Jesús, aquí está su mano poderosa y milagrosa guiándonos hacia el porvenir que soñamos, hacia el porvenir que queremos y hacia el porvenir que Dios mediante alcanzaremos», finalizó la vicedictadora Murillo.
Bruja degenerada ..blafemando… Tocando a Dios con las manos sucias . Pero de él es su Justicia!! De esa ninguno de ellos escapará. Que le sirva para ellos mismo su discurso hipócrita, mediocre. No tienen calidad Moral para decir nada. Que dejen de robarle al pueblo, que dejen de confiscar propiedades. Que le devuelvan a Nicaragua todo lo que se han robado, con lo que se hucieron millonarios cuando no tenían ni dónde caer muertos! Que devuelvan los canales televisivos y radio emisoras que se han confiscado. Descarados Corruptos.
Este articulo parece mas un esfuerzo por republicar las ridiculas palabras de la Murillo que un esfuerzo por informar. Los lectores no necesitamos releer ese discurso desgastado. Si van a escribir algo seria bueno que opinen o informen pero no servir de eco nomàs.
Esya mujer esta loca!!!!!!VAMOS CON CRISTIANA!!!!❤❤❤❤❤