El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ordenó esta tarde congelar las cuentas bancarias y levantar el sigilo financiero de la aspirante presidencial Cristiana Chamorro, según lo confirmó la misma Chamorro a través de su cuenta de Twitter.
«En medio de toda esta burda farsa, la dictadura me ha congelado mis cuentas bancarias y ha levantado el sigilo bancario. Rechazo y denuncio esta arbitrariedad», denunció Chamorro Barrios.
La dictadura sandinista desató una persecución contra la aspirante a la Presidencia de Nicaragua, desde que Chamorro hizo públicas sus intenciones de disputarle el cargo a Ortega.
En enero pasado, Cristiana Chamorro renunció a su cargo como directora de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, y el cinco de febrero esta Organización No Gubernamental anunció su decisión de cerrar operaciones para no someterse a la Ley de Agentes Extranjeros, una legislación que el régimen sandinista aprobó con sus diputados para perseguir a políticos, oenegé y medios de comunicación.
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Aunque la Fundación Chamorro anunció que procederían legalmente con la disolución de la organización, que desde 1995 se dedicaba a promover la democracia, libertades públicas y prensa libre, el pasado 20 de mayo, la exdirectora de la entidad fue citada por el Ministerio de Gobernación para que explicara «inconsistencias financieras», supuestamente reportadas durante los años 2015-2019.
Al día siguiente, el 21 de mayo de 2021, Cristiana Chamorro ya fue citada por la Fiscalía General de la República, también controlada por Daniel Ortega, acusada por el delito de «lavado de dinero, bienes y activos, en perjuicio del Estado y la sociedad nicaragüense».
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Al salir de la citatoria en la Fiscalía, Chamorro declaró que el intento de criminalizarla «es una monstruosidad» y denota «el horror» que le tiene Ortega a la posibilidad de que ella lo enfrente en las urnas el próximo siete de noviembre, cuando está previsto se realicen elecciones presidenciales y legislativas en el país.
«Es una citatoria para intimidar a toda Nicaragua. Están atentando contra la democracia, están atentando contra el derecho de los nicaragüenses a votar en las próximas elecciones en libertad. Esto es para intimidarnos, para que no salgamos a votar y para que no podamos derrotar a la dictadura de Ortega», declaro la aspirante a la Presidencia al salir de la Fiscalía el viernes 21 de mayo.
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Daniel Ortega se forró con un combo de leyes represivas que inició a aprobar desde el año pasado, que incluye la Ley de Agentes Extranjeros, una Ley de Ciberdelitos, otra legislación de los «Derechos del Pueblo a la Soberanía y la Dignidad Nacional, una reforma al Código Penal y la Constitución para aplicar la cadena perpetua y luego, las normativas electorales que buscan someter a los opositores, partidos políticos y medios de comunicación a control del Consejo Supremo Electoral.
El 19 de Julio de 1979, doña Violeta Barrios de Chamorro madre de Cristiana al igual que Alfonso Róbelo Callejas, Sergio Ramírez Mercado, Daniel Ortega Saavedra y Moisés Hassan Morales llegan al poder como una Junta de Gobierno de Reconstrucción Nacional, sin embargo, esa fecha marca algo muy diferente a lo prometido, pero muy similar a lo que hoy se está desarrollando en Nicaragua. El FSLN a través de sus armas hacen ejecuciones sumarias, encarcelamiento masivo de sus opositores conservadores, los somocistas huyendo hacia Honduras, Miami y El Salvador son perseguidos, las cuentas de cheques de sus críticos son congeladas y el dinero confiscado para se usado por la nueva clase represiva que se engendra en el somocismo pasado. Doña Violeta Barrios y Alfonso Róbelo Callejas son firmantes de esas confiscaciones para congraciarse con el FSLN que les pedían demostrar su fidelidad al nuevo régimen cubano-soviético que se quería establecer en Nicaragua a punta de pistola y sangre. Hoy después de casi 42 años repetimos la misma historia con los mismos actores que fueron los causantes de tanta injusticia, con la única diferencia es que la hija de la firmante de ayer es la que esta recibiendo la medicina que su madre ordeno a los que ella ayer llamo contrarrevolucionarios somocistas. Mucha gente cree en karma y la justicia que da sin desearle el mal al semejante que nos ha ocasionado dolor o desgracias, pero lo triste es que la hija Cristiana está pagando lo que su madre Violeta Barrios de Chamorro creo hace 42 años.