En su alocución de este martes, 16 de marzo, la vocera y vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, utilizó textos bíblicos para despotricar contra los opositores a su régimen, llamándolos fariseos, sepulcros blanqueados e hipócritas. Además, aprovechó el aniversario del natalicio del general José Dolores Estrada para afirmar que su dictadura no se deja humillar por ningún invasor, en referencia a los Estados Unidos.
«Las y los nicaragüenses no nos dejamos y mucho menos ahora; no nos dejamos ofender por quienes todavía pretenden humillar el sentido de dignidad nacional que todos tenemos. No nos humillan, no nos acobardan, no nos arrodillamos, no nos agachamos, no bajamos la cabeza…», destacó.
Murillo llamó fariseos a los detractores a su régimen, utilizando el texto de bíblico de San Mateo capítulo 34, donde Jesucristo habló de amar al prójimo. «Cuánto hay para meditar; amar al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y al prójimo como a ti mismo…».
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«Toda la ley está condensada en esos dos preceptos que debemos cumplir y amar a Dios es amar al prójimo y amar al prójimo es ser íntegro (…) y sobre todo nunca más usar el odio para agredir, para asesinar, para matar, para destruir al servicio de intereses extranjeros y de los mezquinos, miserables, intereses de unos cuantos», atacó la vicedictadora.
Tilda de sepulcros blanqueados a opositores
La vocera de Daniel Ortega leyó otro versículo donde Jesús exhortó a los fariseos llamándolos sepulcros blanqueados y aprovechó para decir que eso es un «retrato» de los opositores que se acicalan para salir en fotos y demandar «males», refiriéndose a las sanciones contra su régimen impuestas por la comunidad internacional.
«Se acicalan para demandar desgracias para Nicaragua; demandando más oscurana todavía para Nicaragua; hipócritas, hipócritas que se muestran como si fueran justos, pero por dentro llenos de hipocresía y de iniquidad», despotricó Murillo, quien además dijo saber que los opositores son «sepulcros blanqueados».


«Los maquillados y acicalados; los mismos que ayer levantaban la mano para exigir que siguiera secuestrada la patria de todos, que cometían crímenes, que secuestraban, que torturaban, que violaban; esos mismos los vemos ahora todos pintaditos, perfectitos en fotografías, pero que ni les lucen, porque todos pudimos ver debajo de las máscaras, debajo de los maquillajes la perversión y toda la inmundicia» recalcó la vicemandataria.
Además tildó a la oposición de serpiente y de generación de víboras y se autopreguntó que «¿cómo escaparán e la condena del infierno? ayer hablábamos de las cargas terribles en las conciencias de los terroristas (…) Hay que saber ver más allá del maquillaje, más allá del artificio, más allá de la falsificación, más allá del fingimiento, más allá de lo que parecen y no son porque los conocemos y abemos lo que son y cuánto hicieron sufrir al pueblo nicaragüense».
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También agregó que los ciudadanos que están en contra de su dictadura son «huesos y enmascarados de lata y de trapo y que a nadie engañan» pese a exigir sanciones en contra de su gobierno señalado de ser responsable de crímenes de lesa humanidad.
Con relación a la llegada de las 135 mil vacunas contra el COVID-19, donadas por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), a través del mecanismo COVAX, Rosario Murillo agradeció y aprovechó para nuevamente atacar a sus adversarios, afirmando que Nicaragua recibió la donación por ser un «país empobrecido por los sepulcros blanqueados de tantas latitudes».


La esposa de Daniel Ortega concluyó su acostumbrado monólogo reiterando que «las miradas de odio» nunca volverán y que «esos remedos de búsqueda de bien común nunca volverán (…) Estamos llamados al amor, no a seguir humillando y sometiendo a la pobreza a las familias de esta Nicaragua».