El mandatario de Nicaragua Daniel Ortega pidió auxilio a los Estados Unidos y Europa para que «los países en vías de desarrollo» accedan a la vacuna contra el COVID-19, al tiempo que acusaba a Estados Unidos de bárbaros, terroristas, gánsteres y hegemónico.
«Tenemos que actuar con un sentido de justicia y de prioridad para los que están en mayor fragilidad, hay que aplicarles la vacuna y en los países, ¿Cuáles son los países donde se debe dar prioridad? Es en los países en vías de desarrollo», reclamó este lunes, 22 de febrero, durante un homenaje en ocasión al 87 aniversario del asesinato de Augusto C. Sandino.
«Que no se olviden los Estados Unidos que en este planeta nadie sobra, y es importante hacer de un lado las actitudes hegemonistas (..) y en este momento el planeta se encuentra en grave riesgo, porque ya la cantidad de muertos por la pandemia ya va marcando millones de fallecidos», expresó.
En su perorata en la que hizo referencia a una alianza entre EE.UU. y Rusia para derrotar el Nazismo de Adolf Hitler, manifestó que «el arma en este momento para enfrentar a ese enemigo- del que no escapan los magnates- es enfrentarla unidos y más allá de estas medidas (de seguridad), es la vacuna».
«Pero la vacuna está en manos de los países poderosos, y claro, es un gran negocio para las empresas fabricantes de vacunas, pueden ponerle cualquier precio a la vacuna, los organismos como la OMS y la OPS han sido claros, porque la vacuna ya se está poniendo».
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Según Ortega, cuyo régimen aún no da a conocer un plan de vacunación y asume cuestionables cifras de contagios, Nicaragua tiene fondos disponibles para comprar esas vacunas, y ahora, queda ver las condiciones para acceder a los fármacos.
«Pero los Estados Unidos no pueden estar actuando como han estado actuando, volando patadas, sanciones, con actitudes hegemonistas, poniendo en riesgo con armas atómicas, son momentos estos donde tendrán que reflexionar (…) Eso es lo que tienen que hacer ahora las potencias, que busquen puntos de aproximación para que podamos salvar a la humanidad», dijo.
«Cuánta falta hace en este momento un acuerdo, un alto al fuego en todo tipo de agresiones entre todas las naciones del mundo», imploró el dictador, acusado por la Comisión Interamericano de Derechos Humanos (CIDH) de cometer crímenes de lesa humanidad contra la población civil.
Por otro lado, Ortega, reclamó a Estados Unidos, que «se dice la nación más respetuosa de los Derechos Humanos, la nación más pura y más limpia del planeta, (pero) es tan puro y tan limpio que se atribuyó el derecho, compitiendo con Hitler, a ver quién desarrollaba primero la bomba atómica».
«¿Dónde están los bárbaros, dónde están los terroristas? ¡Están en Washington, están en Washington, los bárbaros, los terroristas!», expresó el dictador. «Así hablan y así actúan los imperialistas, como Hitler, Hitler es el mayor imperialista de la barbarie», añadió.
Ortega también recriminó las sanciones impuestas por Estados Unidos y en consecuencia, la Unión Europa y otros Estados en contra del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela por corrupción y otros crímenes. El mandatario aprovechó el informe de la relatora especial de las Naciones Unidas, Alena Douhan, quien recientemente instó a EE.UU. a retirar las sanciones por «exacerbar las calamidades» y provocar crisis económica y humanitaria.
«El informe que elaboró esa delegada de las Naciones Unidas, es realmente doloroso, es realmente doloroso, como el bloqueo, tan brutal como el bloqueo contra Cuba, acompañado del saqueo, del robo, de miles de millones (de dólares) del pueblo venezolano, que están siendo robados por las potencias, se están quedando con fondos que fueron depositados en esos países, y ahora se quedan con las riquezas, se quedan con los negocios, aquí diríamos, no son rateros, ni son ladrones, son gánsteres, más gánsteres que Al Capone, y todo esto lo hacen en nombre de la libertad y en nombre de la justicia», comparó Ortega.
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«Desde aquí, desde esta plaza le decimos a nuestro hermano Nicolás que el pueblo de Nicaragua sigue firme y seguirá firme en su acompañamiento y en su solidaridad con el pueblo y el gobierno de Venezuela, y que no dejaremos de clamar como lo hacíamos en todas las conferencias que pueden darse, clamar y reclamar que cesen las sanciones contra el hermano de Venezuela y contra el hermano pueblo de Cuba», manifestó.
El mandatario de la llamada «troika de la tiranía» (Venezuela, Cuba y Nicaragua), afirmó que no pueden «dejar de ser consecuentes con nuestros principios (..) que nunca bajó la cabeza frente a los conquistadores, nunca bajó la cabeza frente al imperio yanqui ante las diferentes agresiones».
El dictador de Nicaragua reapareció después de 40 días sin dar la cara cuando participó en la ofrenda floral que le colocaron este domingo, 21 de febrero, al general Augusto C. Sandino, en la conmemoración del 87 aniversario de su asesinato.
El Dianlo repartiendo escapulario.
Se le olvidó que las vacunas se compran, se le olvidó que el gobernante de cada país debe de hacer lo pertinente para tener acceso a las vacunas, se le olvidó que las vacunas se comparn, que deje de robarle al pueblo de Nicaragua, para que haya plata para TODO.
Y que deje de enviar plata del pueblo robada por la familia Ortega Murillo a paraísos fiscales.