La vicepresidenta del régimen, Rosario Murillo, emitió su discurso de Navidad este jueves, 24 de diciembre, en el que reiteró su monólogo de odio y amor, surtido con la festividad religiosa y la celebración comercial.
«Damos gracias al Niño Dios porque ese odio ha ido quedando completamente atrapado, en las redes- no redes sociales-, como las telarañas, donde se vive con ceguera y se vive en negación, y se vive con delirios y delirios de grandeza, cuando todos en este mundo somos de esta y de otra vida, de otro plano», manifestó Murillo en su comunicación diaria a los medios de comunicación gubernamentales.
«Y sabemos que todo es efímero y sabemos que en la humildad, en el reconocimiento de nuestra condición pasajera, somos viajeros; en la humildad, en la sencillez ahí esta el amor, y ahí está Dios», agregó la vocera del régimen que promovió la reelección presidencial indefinida y otras leyes que limitan la participación política de grupos opositores.
En su amalgamado discurso, Murillo aseguró que «(el régimen) no estamos ciegos» y repitió la palabra «odio» a lo largo de su razonamiento.
«El odio pervierte, el odio ciega, el odio niega al otro, al prójimo (..) y este pueblo nuestro y todos nosotros como pueblo, creemos en el amor que ilumina, el amor que enseña, el amor que muestra, el amor que dice “el prójimo, el hermano”, verlo, acercarlo, sentirlo, compartir».
«El odio que todo niega y que todo ciega ¡Terrible padecer ese mal!», resaltó.
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Aceptó que el país ha atravesado «incertidumbres», entre ellas, la pandemia del COVID-19. Según Murillo, el modelo implementado por su administración logró enfrentar la crisis sanitaria, pese a que las cifras oficiales de casos positivos no coinciden con las reportadas por la población y registradas por especialistas independientes.
«Llegó la Nochebuena y mañana Navidad. Sabemos que nos trae tantas cosas bonitas y nos ha bendecido a través de un año tan complejo, tan difícil (…) Hemos atravesado dolores, con amor, hemos atravesado incertidumbres. Esta pandemia es una incertidumbre (..) El Señor nos ha bendecido con un modelo de salud, de presencia directa, que nos ha permitido caminar con responsabilidad».
Homenaje a sus muertos
En su perorata que enalteció los colores, olores y luces navideñas, informó que este 27 de diciembre, el régimen realizará un concierto para los fallecidos.
«Rindiendo homenaje a nuestros seres queridos que este año partieron a otro plano de vida y a todos los seres queridos que están ya, desde antes, en otro plano de vida y a los que sentimos con nosotros porque sabemos que están con nosotros y les cantamos y les decimos “Aquí, en esta Nicaragua bendita”, cada uno de nuestros seres queridos, desde ese otro plano, es para nosotros un ángel que propicia lo mejor para la propia familia y para todo el pueblo nicaragüense», manifestó.
Murillo no brindó el reporte anual del régimen, ignoró las denuncias sobre los atropellos de la dictadura, los presos políticos y la crisis socioeconómica que el país enfrentó a lo largo del año.
Está bruja asesina es quien vive en otro plano d vida!! Ni la madre q la parió pudiera creer semejantes mentiras. Habla d Dios, y su Dios es satanás!! Y está muy consciente d lo q dice xq lo vive en su propia carne, el odio q mata, destruye, y atropellar a los inocentes e indefensos. No hay ni la más mínima duda que la bruja y moclin son monstruos de los más horribles q satanás tiene a su servicio. El dúo asesino y sus batracios son almas condenadas, dos veces muertos en sus propias maldades, almas q se retorceràn en lo más profundo del abismo q está destinado para las almas malditas. Su dios es satanás!!!
Vieja bruja, que más odio que el de la pareja maldita a su propio pueblo nicaragüense!
Ésta señora, es zinica y descarada.