El Departamento de Estado de Estados Unidos incluyó a Nicaragua en la lista de los 20 países de Latinoamérica y el Caribe que han sido identificados para que sus ciudadanos no puedan viajar, debido a la pandemia del COVID-19 en el mundo. La administración norteamericana insiste en que es una alerta de viaje global.
En una misiva, la administración de Donald Trump señala que por «las condiciones de salud y seguridad que mejoran en algunos países y potencialmente se deterioran en otros, el Departamento está volviendo a nuestro sistema anterior de niveles de asesoramiento de viaje específicos para cada país, para dar a los viajeros información detallada y procesable para tomar decisiones de viaje informadas».
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Los países latinoamericanos y caribeños que aún se encuentran en alerta de «no viajar», son: Argentina, Bahamas, Belice, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, El Salvador, Guatemala, Guyana, Guyana Francesa, Haití, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Perú, República Dominicana y Venezuela.
EE.UU. justifica su decisión con que en esos países los números de casos y muertes por coronavirus continúan en aumento. Además, incluyen una lista de 16 países, en los que sus ciudadanos deben «reconsiderar el viaje».
Los países son: Antigua y Barbuda, Aruba, Barbados, Bermuda, Chile, Curazao, Dominica, Ecuador, Grenada, Jamaica, Paraguay, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam, Trinidad y Tobago, y Uruguay.
El Gobierno de Donald Trump insiste en que «seguimos recomendando a los ciudadanos estadounidenses que ejerzan con cautela cuando viajen al extranjero a causa de la naturaleza impredecible de la pandemia».
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En Nicaragua, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo a través del Ministerio de Salud (Minsa), reconoció hasta el martes, cuatro de agosto, un total de 3,902 casos confirmados por COVID-19, 123 fallecidos y 2,973 recuperados. Mientras, el Observatorio Ciudadano registró hasta el primero de agosto, un acumulado de 9,044 casos sospechosos y 2,537 muertes como consecuencia de la pandemia.