La aplanadora orteguista de la Asamblea Nacional condecoró la mañana de este jueves, seis de agosto, a los trabajadores de la salud, que desde el inicio de la pandemia del COVID-19 han estado al frente en la lucha para contener los contagios y muertes en el país, pese a que la dictadura de Daniel Ortega no les ha brindado los equipos de protección para atender la emergencia sanitaria.
El reconocimiento de los diputados orteguistas se da en el marco de la celebración del Día Nacional del Trabajador de la Salud, que se celebra los 8 de agosto. En el plenario estuvieron presente figuras aliadas del régimen como la ministra de salud, Martha Reyes, el secretario general del Ministerio de Salud (Minsa), Carlos Saénz, y la sancionada Sonia Castro, exministra de salud y ahora asesora presidencial.
«Son más de 36 mil trabajadores de salud, un ejército de amor, de dedicación, un ejército compuesto mayoritariamente por compañeras, por mujeres, por eso es un ejército perfecto (…). Hace 12 años éramos 21 mil (trabajadores de la salud), hoy somos 36 mil y estamos claros que tenemos que seguir», manifestó el presidente de la Asamblea Nacional, Gusta Porras.
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Porras, quien también fue sancionado por Estados Unidos, refutó que en Nicaragua diversos sectores opositores intenten politizar el sistema de salud pública, pero mientras se desarrollaba la sesión, la mayoría de médicos levantaban la bandera rojinegra del partido Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
«Estos compañeros actúan para salvar vidas y eso es verdad. Ustedes no están preguntando color político, referencias religiosas, ustedes actúan para salvar vidas y así deben de seguir haciéndolo», se dirigió Porras a los 43 trabajadores de salud que se encontraban en el plenario, mismos que fueron seleccionados como los más destacados.
Los halagos al personal de salud se dan pese a que la Asamblea Nacional, durante estos cinco meses de pandemia, no ha gestionado ninguna ley que permita brindarle protección a los «héroes de bata blanca». Entre abril y junio la dictadura de Daniel Ortega despidió a más de 15 especialistas que evidenciaron el mal manejo de la pandemia por parte del Minsa.
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Los médicos denunciaron en su momento, que las autoridades sanitarias les obligaban a no poner en el registro de los pacientes el diagnóstico de COVID-19, aunque las pruebas hayan dado positivo. La orden del Minsa era ponerle neumonía atípica, igual sucedía con las actas de defunción.
«La Asamblea Nacional reconoce la ardua labor heroica que realiza el gremio de los trabajadores de la salud frente a la lucha contra pandemia y todas las enfermedades, respondiendo con dedicación, esfuerzo, atención humanizada, cariño, compromiso y labor patriótica a cuido, recuperación y bienestar de todo el pueblo nicaragüense», expresó la diputada orteguista Gloria Raquel Dixon.
Que vivan los heroes de la Salud