Una ciudadana que trabaja en la Catedral de Managua fue sacada por la fuerza por varios agentes policiales después de una supuesta inspección que hizo en el lugar del atentado la comisionada general de la Policía, Glenda Zavala, jefa del laboratorio de criminalística.
Según la información preliminar, la detenida podría ser la señora Alba Ramírez, la ciudadana que declaró a medios de comunicación que logró reconocer al sujeto que desató el incendio que terminó por carbonizar la imagen de la Sangre de Cristo, este viernes, 31 de julio.
#URGENTE La Policía orteguista, al mando de la jefa del laboratorio de Criminalísitica, comisionada Glenda Zavala, se llevó detenida a la señora Elba Ramírez, testigo del ataque terrorista que provocó la quema de la Sangre de Cristo en la Catedral de Managua. #DerechoAInformar pic.twitter.com/zCXvKx9zET
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La Policía no dio mayor explicación de las razones de la detención, y en un video que circuló inmediatamente se observa a los uniformados forcejear para sacar a la testigo, en medio de los intentos de sacerdotes y religiosas de la Catedral por evitar la detención. En el video a penas se logra escuchar a la ciudadana que clama: “¡No me dejen sola!”, mientras uno de los sacerdotes pedía a los policías: “¡Suéltenla, por favor!”
La señora Alba Ramírez declaró a medios de comunicación, después del incendio en la capilla de la Sangre de Cristo, que el terrorista “es un joven delgado, encapuchado con una camisa, que traía algo envuelto en las manos”.
Ella es Alba Ramírez, la testigo del ataque terrorista en Catedral, que hoy fue sacada por la fuerza del templo por la Policía. #Artículo66 #DerechoAInformar pic.twitter.com/rLVfSUhPt2
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El terrorista “llegó hasta donde nosotros y nos dijo que venía a la Sangre de Cristo. A los minutos nos dimos cuenta que se estaba incendiando la Sangre de Cristo, y él se tiró todos los muros”, dijo la mujer que labora en el templo mayor del catolicismo en Nicaragua.
El atentado contra la catedral de Managua fue calificado por el cardenal Leopoldo Brenes como “un acto terrorista planificado”. El jerarca católico desmintió a la vocera gubernamental Rosario Murillo, quien declaró en sus medios de propaganda, y sin tener el conclusivo de la Policía, que el incendio fue causado “por unas veladoras”.
En horas de la tarde, la Policía al servicio de Daniel Ortega emitió otra versión. En el cumunicado, la institución informó que en la escena del crimen encontraron un atomizador plástico color anaranjado, que, supuestamente, continía alcohol, e inmediatamente descartó cualquier residuo de pólvora o líquido inflamable como gasolina o gas.