Simpatizantes del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) invadieron la Catedral de Managua, donde se realiza la misa de cuerpo presente del poeta y sacerdote Ernesto Cardenal, quien murió el primero de marzo por problemas en el corazón y quien, además fue un crítico de la familia presidencial.
Con pañuelos rojos y negros se ubicaron en todas las bancas de la iglesia, pese a los diversos ataques que realizaron contra Cardenal mientras estuvo vivo.
Algunos activistas desde sus redes sociales han condenado la acción de los simpatizantes y acusan a la vicepresidenta y primera dama Rosario Murillo de irrespetar y provocar la actividad religiosa.
“Irrespeto y provocación: Rosario Murillo envió a un grupo de sus siervos a la misa de Cardenal. Ya sentados se reparten pañoletas rojinegras entre ellos”, denunció la periodista Sofía Montenegro desde su cuenta en redes sociales.
Durante su vela en una funeraria de la capital también hubo asedio de la Policía Nacional. Los oficiales se apostaron en los alrededores de la Funeraria Monte de los Olivos con dos camionetas y varios oficiales de la Dirección de Operaciones Especiales (DOEP).
La misa inició a las tres de la tarde y sus funerales se realizarán en Solentiname el viernes, 6 de marzo.

DE VERDAD QUE ESTOS TURBEROS SANDINISTAS YA PERDIERON TODO JUICIO Y TODA CORDURA. LOS FANÁTICOS SANDINISTAS SON, SIN TEMOR A EQUIVOCARME: LADRONES ASESINOS, MAREROS, VULGARES, VANDÁLICOS, MENTIROSOS, SÍNICOS, DELINCUENTES, IRRESPETUOSO Y LOCOS.