Poetas, amigos y familiares asistieron desde tempranas horas, de este lunes, dos de marzo, a la Funeraria Monte de los Olivos, en Managua a darle el último adiós al poeta y sacerdote Ernesto Cardenal, quien falleció la tarde de este domingo, primero de marzo, a sus 95 años. Pese a que la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo envió sus condolencias y decretó tres días de duelo nacional, en las afueras se encontraban apostados más de tres patrullas de la Policía asediando el lugar.
El coordinador de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD), Carlos Tünnermann, enfatizó que la “patria está de duelo -no porque el gobierno lo haya decretado- porque el pueblo de Nicaragua se siente de duelo (…) Hemos perdido a su máxima figura literaria porque era el más reconocido mundialmente que teníamos como nicaragüenses (…) Cardenal recibió el máximo Galardón Reyna Sofía y la condecoración Pablo Neruda”.
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Tünnermann recordó que Cardenal “estuvo desde un principio en la lucha contra la dictadura de los Somoza (…) Ahora, en cuanto al régimen actual Ortega-Murillo estaba en contra, él soñaba en una Nicaragua libre y pensaba en que nuestra obligación era heredar a las nuevas generaciones un país con una cultura política diferente”.
Asimismo, la poeta y escritora Gioconda Belli señaló que “Cardenal nunca estuvo con la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, de la cual sufrió persecución” y agregó que las “condolencias” del gobierno es “un acto de cinismo porque durante estuvo vivo lo trataron muy mal (…) es fácil decir que van a dar honores a un muerto”.
A la vela también asistió la defensora y presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, quien manifestó que la muerte de Cardenal conmueve. “Uno sabe que tiene que llegar, pero uno nunca lo acepta como una realidad (…) ahora él no se va, porque seguirá luchando con nosotros. Tenemos que sembrar la semilla que él dejó (…) ahorita hay una situación indignante el gobierno con su doble discurso tiene izada la bandera a media asta por la persona que tanto persiguieron y al mismo tiempo tienen en las calles a la Policía”.

Jaime Morales Carazo, exvicepresidente de Nicaragua y diputado orteguista ante el Parlacen, expresó que el fallecimiento es “una pérdida irreparable”, pero al ser cuestionado por la presencia de la Policía en las afueras de la funeraria, se molestó y dijo que “cuando yo entré no habían tantos policías que me dijeron, pero si es parte de la panorámica de la ciudad. A mí no me asombra ver tanta Policía en la ciudad”.
La activista Ana Margarita Vijil remarcó que Cardenal “fue un hombre valiente, temerario, irreverente ante el poder y que nos deja un gran legado del que me siento orgullosa”. En ese mismo sentido, Edmundo Jarquín manifestó que “es una pérdida también en el sentido literario, político y espiritual (…) Lo más relevante de su muerte es que él luchó toda la vida contra la dictadura de Somoza. Hoy debemos de continuar luchando contra la dictadura Ortega Murillo que persigue, acosa, injuria a los nicaragüenses disidentes de su poder”.
A la funeraria también llegaron estudiantes, quienes rindieron honor al poeta y recitaron algunos versos de los principales poemas de Cardenal. Mañana (martes, 3 de marzo) a las tres de la tarde se oficiará la misa de cuerpo presente en la Catedral de Managua.