Desde que entró en vigencia el 1 de marzo, la reforma tributaria que aumentó el impuesto de los productos, los trabajadores formales se han visto afectados por la ola de despidos. Recientemente la tabacalera British American Tobacco (Batca) notificó que un tercio de su estructura comercial y de cigarrillos quedarían desempleados.
Según, una de las fuentes consultadas por la plataforma digital Confidencial, dicha acción incluye “más de 60 puestos de trabajo bien remunerados”. También, destacó que la crisis sociopolítica que inició en abril de 2018, no les afectó tanto a como lo hizo la reforma tributaria, que provocó que el impuesto de los cigarrillos incrementaran a 210%.
La misma fuente explicó a Confidencial que el impuesto por cada cajetilla de cigarrillos de 20 unidades, es de 40 córdobas, lo que llevó a encarecer el costo, generando un precio de hasta 75 córdobas, luego que su valor rondaba los 30 córdobas.
En un comunicado, la empresa destaca que “las reformas a la Ley de Concentración Tributaria aprobadas en febrero del año en curso tuvieron un impacto dramático en la industria legal del cigarrillo en Nicaragua. Los incrementos en el impuesto del cigarrillo de 210 por ciento obligaron al sector formal a efectuar incrementos de precios que van más allá de la capacidad adquisitiva del consumidor”.
En enero del próximo año, los precios del cigarrillo aumentarán un 25 %, por lo que existe la posibilidad de despedir a más trabajadores. De igual manera, la fuente consultada por Confidencial dijo que a raíz del alza en los productos se empezó a comercializar cigarrillos ilegales, lo que causará más desempleo.
“En total, 2000 córdobas es el impuesto que pagan cada 1000 cigarrillos en 2019. En 2020, ese monto subirá 25%, para llegar a 2500 córdobas, y otro 38% sobre nuevo precio, para llegar a 3450 córdobas por cada millar en 2021”, detalla el medio.