Carlos Cárdenas, Douglas Villanueva y Henry Lara fueron secuestrados el 23 de septiembre en el departamento de Chinandega y trasladados a la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como El Chipote, en Managua. Los tres jóvenes al momento de su detención se encontraban en el depacho jurídico Roberto Lira y Asociados, donde laboraban.
Su abogado defensor Roberto Lira, manifestó que desconocen el estado de salud de los ciudadanos detenidos y que no les han permitido tener contacto con nadie.
La pareja de uno de los secuestrados aseguró que desde su detención ha ido a las delegaciones policiales para conocer su paradero, pero estos no les dan información; sin embargo por fuentes extraoficiales se dieron cuenta que los jóvenes estaban en “El Chipote”.
En el caso de Henry Lara, el año pasado fue encarcelado por la Policía de la dictadura por participar en las protestas autoconvocadas por los ciudadanos que pedían la libertad de los reos políticos y justicia por los asesinados.
Su abogado defensor detalló que su detención se dio porque los Villanueva, Cárdenas y Lara recogieron firmas en algunas comunidades de Chinandega para exigir la liberación de más de 120 reos políticos, registrados por la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia.
Finalmente Lira denunció que desde la detención de sus colegas ha sufrido hostigamiento y acoso por simpatizantes del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN); además han dejado marcas en su casa que lo señalan de “golpista”.
Pablo Cuevas, abogado de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) tomó la denuncia y explicó que estarán acompañando a los afectados y que van a exigir la liberación inmediata de los jóvenes.