El informe presentado por la Articulación de Movimientos Sociales (AMS) en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) resalta que la nueva fase de represión del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo se centra en “ejecuciones extrajudiciales”, contra los ciudadanos opositores o que han participado en las protestas iniciadas el 18 de abril de 2018.
“La secta fase: Ejecuciones extrajudiciales. Se pudo confirmar la tortura como otro tipo de crimen de lesa humanidad cometido por el Estado de Nicaragua a raíz de las protestas sociales, lo que ya había sido advertido por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) tras la elaboración de su informe en 2018”, detalla el documento.
Amaru Ruíz, miembro de la AMS y presidente de Fundación del Río, destacó que la violación a los derechos humanos que se vive en las comunidades rurales de Nicaragua es una muestra más que la dictadura no quiere encontrar una solución a la crisis sociopolítica, económica y humanitaria.
“La situación de violación de derechos humanos también se presenta en los territorios rurales y transfroterizos del país, los que viven situaciones de incertidumbre y zozobra debido a la militarización de las comunidades, persecución de ciudadanos que participaron en las protestas, asedio por parte de la Policía Nacional y hostigamiento a autoridades municipales opositoras, entre otros. Nos preocupa, ver como en Nicaragua no hay disposición de las autoridades de garantizar verdad, justicia y reparación de las víctimas”, explicó.
La socióloga y experta en temas de seguridad Elvira Cuadra realizó un monitoreo sobre los asesinatos ejecutados contra campesinos en las montañas de Nicaragua, entre octubre de 2018 y julio de 2019. El informe recoge un total de 29 ejecuciones contra campesinos, los que, según Cuadra, fueron aniquilados a balazos por policías y paramilitares de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
El informe recoge que de los 29 crímenes, 21 estuvieron relacionados directamente con la situación política y 8 por razones vinculadas con delincuencia común. Sin embargo, aun estos ocho crímenes, aparentemente comunes,”testigos o familiares señalan como hechores a policías y paramilitares”. El estudio revela que la mayoría de asesinatos se cometieron con armas de fuego.
Estos Asesinos Criminales Genocidas de Lesa Humanidad saben que están hasta el cuello de la sangre derramada por el pueblo, no será fácil que dejen el poder sin antes asegurarse que impere la impunidad. Es viable decirles a qui nes están condenados de crímenes de Lesa Humanidad que se vayan y ellos accedan? Ellos ya están condenados y se aferran al poder a cualquier costo, debemos prepararnos para en un futuro cercano de aplique el derecho internacional en consecuencia con los crímenes cometidos.