Desde que se anunció la creación de la Comisión de Alto Nivel de la Organización de Estados Americanos (OEA) que analizará la situación de Nicaragua y buscará una solución pacífica a la crisis que se vive desde abril de 2018, tanto analistas como líderes políticos han apostado por una nueva negociación entre la Alianza Cívica y el régimen orteguista.
Ana Margarita Vijil, miembro del Movimiento Renovador Sandinista (MRS), explicó que la conformación de la Comisión es relevante para avanzar en los procesos de negociación. “Si la deja entrar va a ser muy importante para que los nicaragüenses podamos expresarles lo que los informes ya dicen sobre lo que estamos viviendo, que hay presos políticos y que nos están asesinando como en el norte del país. Necesitamos que la OEA tome medidas más contundentes con Daniel Ortega”.
Por su parte, el exembajador de Nicaragua en la OEA y analista político Bosco Matamoros aseguró que uno de los objetivos de la Comisión es lograr una negociación entre la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD) y encontrar una salida pacífica a la crisis que atraviesa el país.
Resaltó que es necesario que ingresen al país para entender la problemática de la nación porque la solución no es solo la ruta electoral. Destacó que el Gobierno Ortega-Murillo tiene un acuerdo con la OEA y otros organismos internacionales de derechos humanos que debe de respetar.
Más sanciones
A pesar de que los líderes políticos apuestan a que el dictador Ortega permita el ingreso de la Comisión estos creen que si continúa con la negativa provocará que la comunidad internacional tome una posición más dura y aplique más sanciones.
“Se va a endurecer la posición de la comunidad internacional tanto como Canadá, Estados Unidos y la Unión Europea aplicarán más sanciones porque el Gobierno no quiere respetar los acuerdos”, detalló Matamoros.
De igual forma, José Pallais, miembro de la mesa de negociación, explicó que las sanciones en este caso no solo afectarán al régimen de la familia Ortega-Murillo, si no a los nicaragüenses porque la posición del Gobierno aísla cada vez más al país.
Alianza Cívica pasará informe a la Comisión
Pallais aseguró a Artículo 66 que la Alianza Cívica está dispuesta a trabajar con la Comisión y notificarle todos los abusos y violaciones de derechos humanos que hay en Nicaragua. “Van a organizar sus reuniones, a organizar sus actividades, y la Alianza Cívica va a interactuar con ella, acercarse y a transmitirle un informe exhaustivo de la situación del país y a compartir cuáles son las salidas que la Alianza ve para la solución nicaragüense”.
Por su parte, Mario Arana, miembro negociador resaltó que es “prematuro” analizar las consecuencias de no permitir la entrada de la Comisión, y que además la posición del Gobierno ha cerrado todas las posibilidades de una futura negociación.
Finalmente, Arana y Pallais sostienen que el dictador Ortega apuesta a que la comunidad internacional se canse, que no vea una salida, deje de insistir y se olvide de la situación de Nicaragua y “vea para otro lado”. Dicha comisión tiene tres meses para trabajar en este país y contribuir con la salida de la crisis que atraviesa el país desde abril de 2018.
