Hoy primero de febrero se desarrolló en la ciudad de Berna, Suiza, el Foro «Disparan a matar», donde se presentaron los últimos reportes de Amnistía Internacional sobre la represión y la crisis que vive Nicaragua desde el 18 de abril.
Luego de la presentación, donde se hizo un recuento de la manera en la que el régimen de Daniel Ortega ejecutó una serie de violaciones a los derechos humanos, también se realizó una exposición feminista con la que se explicó el rol de las mujeres dentro de las protestas cívicas, que actualmente están prohibidas en Nicaragua por la dictadura y la Policía.
La charla fue presentada por la activista de derechos humanos Oralia González. Los nicaragüenses exiliados en Europa señalaron que continuarán desarrollando presentaciones y ponencias para visibilizar la crisis que vive Nicaragua y continuarán demandando libertad para los presos políticos y libertad para el pueblo.
En mayo de 2018 y en plena crisis, Amnistía Internacional presentó su informe sobre la situación de los derechos humanos en Nicaragua. Según este organismo, las autoridades nicaragüenses han adoptado una estrategia de represión caracterizada por el uso excesivo de la fuerza, ejecuciones extrajudiciales, el control de los medios de comunicación y el uso de grupos parapoliciales. Estos claros patrones han continuado desde entonces y se han agudizado.
