La vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, alineó sus cañones para atacar a la oposición que salió a las calles a protestar por la inoperancia del régimen para atender el incendio en la Reserva Indio Maíz y el asalto a los trabajadores con las reformas al seguro social en 2018.
Murillo está «traumatizada» y no logra pasar la página de ese episodio oscuro de su gobierno que atacó sin clemencia a los nicaragüenses que marcharon a lo largo y ancho del país. La vocera del régimen tildó las manifestaciones sociales como una «explosión diabólica de odio» y señaló que «Lucifer» quiso tomarse los avances que había obtenido su administración.
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«El pueblo de Nicaragua ha querido dejar atrás esa explosión diabólica del odio, maldad y perversión. Ha podido más la reivindicación de justicia y paz que esos terribles traumas y recuerdos, dolores y sufrimientos. Bendecidos esos sufrimientos por las manos que convocaron, que estuvieron ahí decidiendo quién pasaba, quién vivía, esa es la verdad. Transmitían sus orientaciones sus directrices, esas manos que se contaminaron, y que han sido contaminadas en muchos momentos de la historia, del odio, de la injusticia, del abuso y del crimen», señaló.
Murillo asegura que en Nicaragua «todos sabemos que vamos adelante y que estamos cambiando más y más» y que esos avances los «quiso tomar el odio, los quiso tomar Lucifer, pero que no pudieron ni podrán. Aquí todos queremos justicia y paz y caminamos desde la justicia y el fortalecimiento cotidiano de la dignidad humana en paz, familia, bienestar, derecho y dignidad».
La vicedictadora resaltó que la soberanía no se discute, sino que la defienden porque «aquí ya nadie quiere injerencia extranjera». «Nuestra bandera nunca será mancillada por nadie, ni por ajenos, ni por vendepatrias. Respeto, respeto, respeto. Todo el tiempo ratificamos, en nombre de todos los nicaragüenses que han dado por la patria, la vida. Soñando en esta patria libre de discriminación, libre de destrucción y sobre todo libre de odio».
«Aquí con odio no pudieron, ni podrán. Porque como dijo el más gran de héroe de Las Segovias, no discutimos nuestra soberanía, solo la defendemos porque aquí ya nadie quiere injerencia de extranjeros», advirtió.