El gobierno de Suiza anunció que ha renovado las sanciones aplicadas desde 2020 contra operadores políticos de la dictadura de Nicaragua, entre ellos, Rosario Murillo y varios de sus hijos, y algunas instituciones que han participado en la red de corrupción y represión contra el pueblo de Nicaragua desde el inicio de la crisis política y social de 2018.
La administración suiza ha sancionado a 21 operadores políticos del régimen sandinista que encabezan Daniel Ortega y su mujer Rosario Murillo. Esta última al frente de la lista de sancionados, junto a sus hijos Laureano, Juan Carlos y Camila Ortega Murillo.
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En la nota oficial de Suiza , publicada en el sitio web de la Federal de Asuntos Económicos, se especifica que, el Consejo Federal Suizo aplicó dichas sanciones en junio de 2020, y han sido renovadas a partir del 22 de octubre de 2024, por lo que mantienen vigente la orden de prohibición que las personas designadas puedan entrar a territorio suizo. Además que se les congele cualquier cuenta bancaria, cheques o bienes que tengan en ese país.
También mantienen vigente la prohibición a empresas y personas del país europeo para que no puedan establecer relaciones de negocios con ninguno de los sancionados. «De esta forma Suiza se adhiere a las medidas adoptadas por la Unión Europea», que fueron anunciadas el pasado 8 de octubre y se extienden hasta octubre de 2025, señala la notificación.
La economía de Nicaragua está excesivamente dolarizada de manera «extraoficial», y aunque la dictadura Ortega-Murillo, a través de Laureano «El Chigüín» Ortega, ha alardeado con sus intenciones de «desdolarizarla», ese proceso debe ser voluntario, y a nadie se le puede obligar a cambiar sus dólares por córdobas, advierte el economista nicaragüense Néstor Avendaño.
En su blog de Economía, actualizado al 20 de octubre de este año, el economista Avendaño destaca que «hasta finales de agosto pasado, la dolarización extraoficial de la economía de Nicaragua, representada por la participación de los depósitos en moneda extranjera en el sistema bancario comercial, fue igual a 58.7% del total de la liquidez del país (M3A)».
El experto señala que ese nivel de dolarización es «excesivo» y que debería ser reducido al máximo de 25%, para que el córdoba recupere y normalice su participación de 75% en la liquidez global de la economía.
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A eso se añade, según Avendaño, que el córdoba, la moneda de curso legal en el país solo ocupa 30.5% en la economía, cuando debería ser de al menos el 75%. Mientras que «el córdoba con mantenimiento de valor», que en realidad, según explica el economista, se trata de «un dólar disfrazado», representa el 10.8% en la economía nacional, «con el saldo total de los depósitos de ahorro y a plazos o cuasi-dinero».
El periodista es Julián Navarrete, que debía escudarse en el anonimato para poder ejercer su profesión, ahora lo puede decir con relativa seguridad y también puede aceptar en público y sin miedo a que lo encarcelen, que ese trabajo titulado «Nicaragua: la vida en las catacumbas», que en enero no se atrevió a firmar, es suyo, y puede recibir con alegría la noticia de que dicho reportaje fue seleccionado como finalista para el IV Premio de Periodismo Joven «Carlos Alberto Montaner».
El reportaje de Navarrete retrata justamente las consecuencias a las que son sometidos los opositores, religiosos, estudiantes y periodistas en Nicaragua. Para quienes ejercer su profesión se ha convertido en un delito que es duramente castigado por el régimen sandinista.
«Hace un poco más de tres meses fui forzado al exilio, después de que la Policía me persiguiera por mi trabajo periodístico… Este trabajo en particular retrata la forma en la que el régimen persigue a sus críticos. Y eso fue lo que me pasó a mí, apenas unos meses después de publicado este reportaje», dice el periodista a Artículo 66 desde su nueva casa en San José.
«Tengo sentimientos encontrados: por un lado estoy contento porque, como dijo el director de la Cátedra Vargas Llosa “por la calidad de los trabajos presentados, el sólo hecho de integrar la lista de finalistas es ya un triunfo”… Pero también es triste recibir la noticia lejos de mi tierra».