Los colonos Ariel Castro Zeledón y Elvin Urbina Luquez están siendo señalados por pobladores indígenas de los territorios mayangnas como los presuntos «principales cabecillas» de una serie de ataques violentos que han dejado como resultado, desplazamientos de comunidades, viviendas quemadas, lesionados y asesinados, según informó, a través de su cuenta de X, el ambientalista y defensor de las comunidades indígenas Amaru Ruiz, director de la ONG en el exilio Fundación del Río.
El ataque más reciente fue perpetrado contra la comunidad Amtrukna, localizada dentro del territorio Mayangna Sauni As, en la Costa Caribe Norte. En dicho suceso fueron incendiadas dos viviendas indígenas y la comunitaria Emelda Palacio fue herida de bala.
En la denuncia pública que hacen los comunitarios indican que Urbina Luquez es uno de los responsables de la invasión en Amtrukna desde su posición de poder político como concejal regional del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) por el municipio de Bonanza y además es muy cercano a la Policía orteguista.
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Mientras que en un cartel escrito a mano, los indígenas nicaragüenses señalan directamente a Castro Zeledón de ser responsable de masacres contra las poblaciones del territorio.
«¡Última hora! Los mayagnnas demandan a Ariel Castro Zeledón, responsable de todos los incidentes, masacres del Kiwakumbaih. Quedó libre siendo implicado en estos incidentes. No fue ‘justiciado’ (llevado a la justicia) conforme las leyes de la nación, Nicaragua», dice la pancarta divulgada por los pobladores de las comunidades autóctonas.
Los indígenas han exigido a las autoridades regionales y nacionales que investiguen los hechos y castiguen a los responsables de los ataques a sus comunidades y específicamente a Amtrukna, e insisten en el respeto a sus derechos territoriales.
La masacre de Kiwakumbaih, por la que señalan como uno de los responsables a Castro Zeledón, fue perpetrada el 23 de agosto de 2021 en el cerro de ese nombre en el corazón de la reserva de Bosawás precisamente en los territorios indígenas. Ese día, según versiones de sobrevivientes, unos 40 colonos armados llegaron hasta el lugar y abrieron fuego mortal, asesinando a por lo menos 13 personas.
En julio de 2023, dos indígenas mayagnas nicaragüenses fueron asesinados en el Caribe de Nicaragua por parte de los invasores de tierras, según denunció en su momento Ruiz.
El Centro por la Justicia y Derechos Humanos de la Costa Atlántica de Nicaragua (Cejudhcan) ha informado, por su parte, que desde la década de 2010 hasta enero de 2021, aproximadamente un millar de indígenas miskitos fueron desplazados de manera forzada hacia otras comunidades, algunas fronterizas con Honduras, así como 46 casos de secuestro, 4 desapariciones, 49 personas lesionadas, 8 heridos en ataques armados y 2 niñas agredidas.
En tanto, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) han condenado estos crímenes y han demandado justicia al Estado de Nicaragua.
Por su parte, el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil) ha advertido que las poblaciones indígenas de Nicaragua corren el riesgo de ser exterminadas por la constante invasión de sus territorios.