El régimen de Nicolás Maduro ordenó la inhabilitación de María Corina Machado, candidata destacada de la oposición, así como el arresto de su equipo, la disolución de cinco partidos políticos y la toma total del tribunal electoral. Sin embargo, los opositores afirman que el dictador de Venezuela cometió un «serio error de cálculo cuando permitió en las elecciones a la ‘extraordinaria’ líder opositora María Corina Machado».
El politólogo y activista político Félix Maradiaga destacó que el mandatario venezolano apostó «a la vieja receta chavista de simular elecciones con condiciones muy limitadas, suponiendo que su aparato de propaganda podría avasallar y anular los esfuerzos de la oposición».
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Sin embargo, el exreo político señaló que «Maduro no es Hugo Chávez, y sus niveles de rechazo y de impopularidad son gigantescos. Chávez al menos podía jactarse de tener capacidad de movilización, pero Maduro es inaceptable, incluso para amplios sectores que vienen del chavismo».
Otro «obstáculo» para Maduro destacado por Maradiaga fue la «persistencia» de Machado. «Ella ha mantenido una línea dura por más de dos décadas de lucha. Despertó un entusiasmo de cambio que no se había visto en mucho tiempo, que coincidió con los acuerdos de Barbados y con el compromiso de Estados Unidos y Europa de respaldar un proceso de transición democrática en Venezuela».
Respecto a la orden de captura contra la candidata presidencial, el activista político apuntó que «con eso el régimen criminal de Venezuela demuestra que las dictaduras no entienden el lenguaje de la diplomacia y que únicamente llevándolas al ‘filo de la navaja’ es que se puede tener una esperanza de cambio democrático».
«Maduro está siguiendo el manual de Daniel Ortega en Nicaragua que, según todos los conocedores de la política de América Latina y aquellos que lo hemos sentido en carne propia, recoge uno de los métodos de represión y de cierre de espacios más extremo en América Latina», apuntó el politólogo, exiliado en Estados Unidos debido a la represión del régimen desatada contra él.
Sin embargo, Maradiaga reconoció que la diferencia entre las situaciones sociopolíticas de ambas naciones es que «en Venezuela sí hay una candidata que es el resultado de un proceso legítimo de (elecciones) primarias de la oposición». «En el caso de Nicaragua, Ortega frustró ese proceso al arrestar a todos los candidatos antes de que se llevaran a cabo las elecciones primarias», agregó.
El excandidato presidencial comentó que «se espera un proceso electoral totalmente amañado» y pronostica que «Maduro saldrá designado, pero nunca electo democráticamente».
De igual manera, el politólogo recomendó «activar los mecanismos de protección para María Corina Machado y para su equipo». Maradiaga sostiene que «no se puede perder de vista que, a pesar de la radicalización de la dictadura en Venezuela, hay una oposición agrupada alrededor de un proyecto aglutinador y eso hace que en medio de toda esa represión, la causa para Venezuela aún no esté perdida».
Actos «arbitrarios» e «ilegítimos»
Por su lado, el abogado Juan Diego Barberena aseguró que las detenciones en contra de colaboradores y miembros de la campaña electoral de Machado son actos evidentemente «arbitrarios, ilegales e ilegítimos», que «demuestran el terror que la dictadura de Venezuela quiere imponer a los electores y a la población».
«Desde luego, esto es una copia al carbón de lo que Daniel Ortega ha venido haciendo en Nicaragua, la repetición del patrón que se manifestó en el año 2021 en Nicaragua con la inhibición electoral de facto en contra de los contendientes electorales, por medio del encarcelamiento arbitrario y la imputación de delitos ‘contra el Estado’ y de ‘traición a la patria’», indicó el jurista.
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Barberena señaló que Maduro busca «que la oposición se autoexcluya del proceso electoral». Además, el opositor recomendó que «la decisión que tiene que tomar la oposición venezolana, encabezada por el partido político de Machado, es dar batalla hasta el último minuto. Eso implica hacer uso del calendario electoral que la dictadura misma ha dispuesto, movilizar a la gente alrededor del ejercicio del derecho al voto y participar en un proceso electoral donde la gente pueda poner en disputa el poder político».
«Todavía el juego está abierto, no se ha terminado de cerrar, y mientras eso suceda, la oposición tiene que aprovecharlo. En las experiencias comparadas de transiciones políticas, hemos visto que estas se han dado en contextos bastante adversos para la oposición y los grupos prodemocracia contra las dictaduras en el poder», opinó Barberena.
Panorama electoral en Venezuela
Venezuela se prepara para unas elecciones marcadas por la inhabilitación y ofensiva judicial contra la principal rival de Maduro, la opositora María Corina Machado. Siete de sus colaboradores fueron detenidos y otros siete tienen orden de captura, incluida su mano derecha, Magalli Meda, quien se asomaba como posible sustituta.
La oposición venezolana expresó su rechazo a las «detenciones arbitrarias» y «persecuciones», que tildó como «una nueva violación al acuerdo de Barbados», el pacto alcanzado, en octubre del año pasado, entre el gobierno venezolano y la oposición, por el que Washington levantó parcialmente algunas de las sanciones impuestas a Caracas.
En los mismos días, el presidente estadounidense Joe Biden ha advertido a Maduro, candidato a su reelección, que si no «cambia de rumbo» reimpondrá las sanciones al sector petrolero y del gas en abril, como ya hizo en enero con la minera estatal de extracción de oro venezolana.