La vicedictadora de Nicaragua, Rosario Murillo, quien ha arremetido con insultos y agresiones verbales de toda clase contra el Gobierno del presidente español Pedro Sánchez, a cuyo país ha tildado de imperialista, colonialista y hasta de «servil» de Estados Unidos, el 16 de noviembre, haciendo gala de su característico cinismo, aseguró congratularse con la reelección del líder socialista español y hasta lo felicitó llamándolo «excelencia, don Pedro Sánchez» por haber logrado un triunfo político que le garantiza cuatro años más como presidente.
Pedro Sánchez, líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), y que gobierna ese país europeo desde 2018, ha sido muy claro en su política exterior que condena las violaciones a los derechos humanos y los crímenes perpetrados por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo. En 2021, la diplomacia española intentó interceder ante el régimen de Managua para lograr la excarcelación de los presos políticos y detener la ola represiva desatada por la dictadura previo a las votaciones presidenciales de ese año.
El intento de mediación internacional fracasó y al ser anunciado dicho fracaso Murillo, que maneja a su antojo la diplomacia del régimen sandinista, soltó una andanada de insultos contra la canciller española Arancha González Laya y el Gobierno de Sánchez.
En una carta cargada de epítetos y vocabulario nada diplomático, la vicedictadora de Nicaragua calificó a la diplomática española de ignorante, insolente, delirante y «trasnochada mandamás».
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Mientras que, al gobierno de Sánchez, a través de ataques a la entonces embajadora de Madrid en Managua, María del Mar Fernández Palacios, lo tachó de «un pálido reflejo de una política injerencista, intromisora, maleducada, malcriada, caprichosa, desvitalizada y servil, de sometimiento y servilismo al yankee invasor».
Murillo se desbocó así en una carta de cinco páginas que fue calificada por medios españoles como «de otra época, con un barroquismo exagerado y salpicada de errores lingüísticos», pese a que la vicedictadora, que es quien redacta los documentos de Cancillería, se jacta de ser muy culta y hasta se dice poeta.
En otros episodios de ataques verbales contra España, Murillo ha tildado al Gobierno de Sánchez como «arrogante, jactancioso, falso, rabioso y ridículo».
«Su excelencia, don Pedro Sánchez», la reverencia de Murillo
Tras conocerse este jueves la reelección de Pedro Sánchez para mantenerse al frente del Gobierno español por cuatro años más, la vicedictadora Murillo, en su nombre y del dictador Daniel Ortega, se apresuró felicitar a Sánchez y a ofrecerle «fortalecer los históricos lazos» entre los dos países.
«Su excelencia y hermano, don Pedro Sánchez. Presidente del Gobierno del Reino de España: celebramos su investidura el día de hoy, celebrando al mismo tiempo la unidad de España alrededor de los intereses supremos de la convivencia para la paz y el bien común», inicia el mensaje de Murillo y Ortega dirigido al mandatario español.
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Párrafo seguido, Murillo saluda y felicita a Sánchez, «con el compromiso de fortalecer los históricos lazos entre España y Nicaragua, que hemos venido trabajando en las nuevas realidades de respeto y reconocimiento de nuestras soberanías».
Finalmente, en el mensaje, Ortega y Murillo le expresan sus «mejores deseos para usted, su pueblo, su familia, y éxitos y realizaciones en su nuevo período de gobierno, en beneficio de las familias de esa España con la que tanto nos une».
El Gobierno de Sánchez ha sido uno de los principales impulsores en Europa de una política frontal de denuncia contra la dictadura Ortega-Murillo. Además, España fue el único país europeo que ofreció otorgar nacionalidad a más de 300 nicaragüenses opositores a los que la dictadura de Managua declaró apátridas a partir de febrero de este año.