Tras finalizar el desfile militar en conmemoración del 44 aniversario del Ejército de Nicaragua, la segunda al mando de la dictadura, Rosario Murillo, resaltó la labor de su gobierno y de la institución castrense en «la defensa de la paz» del país, de quienes —a criterio de ella— han pretendido hacerles daño.
En ese sentido, la vocera gubernamental afirmó que «todavía hay sus cuatro vende patria adentro y afuera» de Nicaragua, en alusión a los presos políticos, opositores casa por cárcel, excarcelados políticos y ciudadanos desterrados, quienes «han salido corridos», enfatizó.
«Cuánto orgullo, cuánta fortaleza, cuánta historia, ahí está la identidad nacional, la defensa de la paz a lo largo de la historia, hemos defendido con todas nuestras fuerzas la paz y el bien, quienes han pretendido hacernos daño, han salido, han salido corridos por el espíritu inmenso de nuestro pueblo, que es el que vemos ahí, nuestro Ejército, nuestro pueblo y todos; y cada uno de nosotros es de verdad un defensor de la paz, de la concordia, de los valores, de la familia, de la patria bendita», dijo Murillo, en conferencia de prensa a medios oficialistas.
Noticia relacionada: Ataque de Avilés a la prensa independiente es «por la sumisión a los dictadores de Nicaragua», afirman periodistas
Asimismo, apuntó que ella, sus simpatizantes y su círculo represor «merecemos, merecemos vivir tranquilos y seguros en nuestra propia tierra como decía nuestro General Sandino. Merecemos alcanzar glorias y victorias más y más, y merecemos llegar a niveles de vida superiores dejando atrás la pobreza que nos han impuesto los enemigos de los pueblos, los enemigos que nos han invadido, que nos han ocupado con la complicidad de los vendepatrias de siempre porque no solo ayer, todavía hay sus cuatro vendepatrias afuera o adentro y nosotros sabemos que el pueblo de Nicaragua rechaza absolutamente esas conductas que no son propias de los nicaragüenses que con orgullo, con valor en San Jacinto lanzamos la piedra que simboliza nuestro carácter, nuestro valor y nuestras luchas cotidianas, la piedra contra todo el odio con el que han amenazado y con el que han pretendido destruirnos».
Agregó que «custodiar la paz y defender la paz y no jugar con la paz es primordial para que esos tiempos mejores vayan llegando día a día para asegurarnos el bien común que tanto y tanto merecemos».
Murillo ataca una vez más a opositores
Por otro lado, en su alocución de este martes, cinco de septiembre, Rosario Murillo aplaudió el discurso virulento y de odio del jefe del Ejército de Nicaragua, Julio César Avilés, afirmando que su dictadura «mantiene una lucha por la verdad y la justicia».
La segunda al mando de la dictadura afirmó que siguen luchando «por el sentido de reparación de todos los daños que los imperios han causado en nuestra Nicaragua».
Al mejor estilo de Avilés, quien despotricó y atacó al periodismo independiente de Nicaragua, la vicedictadora dijo que «a diario» se sostiene «una gran lucha por la justicia, por la paz y sobre todo una lucha en todo tiempo contra la mentira, contra la perversión, la difamación, las calumnias».
Asimismo, dijo que su régimen se siente identificado con el discurso de odio del general Avilés, porque asegura que «hemos vivido todos juntos las miserias a las que nos han expuesto, pero también vivido las respuestas dignas, de espíritu grande que hemos dado como pueblo nicaragüense».
Además, aprovechó para lanzarse una vez más en contra de la oposición nicaragüense, tildándolos de «vampiros chupa sangre», porque asegura que les molesta que ella, a cada momento, repita su frase ya conocida que «con la paz no se juega».
«Con la paz no se juega y además lo hemos demostrado en esta Nicaragua nuestra. Nuestro pueblo que tiene vocación de paz, con dignidad y soberanía», sentenció la esposa del dictador Daniel Ortega.