Héctor Manzanares, de 38 años, fue enviado a juicio después que el juez Rolando Sanarrusia, del Juzgado Sexto Distrito Penal de Audiencias de Managua, admitiera las pruebas presentadas por la Fiscalía este pasado lunes, 10 de julio. El juicio fue programado para este 9 de agosto.
Manzanares es señalado de ser el asesino de la joven Janelieth Noryelis Peña, de 19 años, originaria de Camoapa, que vino a la capital en busca de un empleo para pagar una carrera técnica en computación.
En las pruebas ofrecidas se encuentra el testimonio de dos conductores de caponera de la zona por donde ocurrió el crimen. Uno de estos declaró que escuchó al acusado ofrecerle empleo a la joven en el Hotel Ticomo, ubicado en el km 8.5 de carretera sur. El segundo testigo llevó a la víctima al lugar la noche del crimen.
Noticia relacionada: 50 mujeres nicaragüenses fueron asesinadas en el primer semestre de 2023
En los testimonios también participó el jefe de zona de la Policía, quien recopiló testimonios de mujeres de los barrios aledaños a las que Manzanares les ofrecía trabajo en el área de limpieza, estás señalaron que no se presentaban por la hora en las que realizaba las citas.
Los familiares de Janilieth declararon, luego de los hechos, que ella deseaba estudiar farmacia y que fue criada por una tía que la recibió con sus dos hermanos menores, después de que su mamá falleciera.
Los hechos
El crimen tuvo lugar el pasado 10 de abril en el km 8.5 de la carretera sur, en el hotel Ticomo. A este lugar fue citada la fallecida para presuntamente entrevistarse con los dueños del local. El procesado le dijo que se presentara a las 7:00 pm, hora en la que los dueños llegaban al lugar. Cabe destacar que el local tiene tres años sin ofrecer sus servicios.

La investigación de la escena del crimen arroja que el hombre, que laboraba como guarda de seguridad, llevó a Peña a la parte trasera del local donde forcejeo con ella. El señalado procedió a asfixiarla y robarle sus pertenencias. Al final el hombre arrojó a la joven a un cauce natural que queda detrás del lugar donde se dieron los hechos. De forma extraoficial se conoció que este pretendía agredir sexualmente a la joven, pero este hecho no se confirmo durante la presentación de pruebas.
Condenado y liberado
Manzanares, que laboraba como guarda de seguridad y tenía permiso para portar armas de fuego, tenía antecedentes por un intento de asesinato por el que se le encontró culpable. Este crimen lo ejecutó en el departamento de Matagalpa en el 2009. Un juez cambió la medida cautelar y le otorgó libertad condicional, por la que debía presentarse cada viernes a firmar.