La libertad de prensa está siendo atenazada hasta el ahogamiento en Centroamérica, donde los gobiernos de Guatemala, El Salvador y Nicaragua se han lanzado contra los medios de comunicación independientes que han criticados sus gestiones.
Guatemala, es el más reciente caso de ataques mortales conta un medio de comunicación. elPeriódico, un medio especializado en investigaciones, anunció este viernes su cierre definitivo porque no logró sobrevivir a las embestidas del Gobierno guatemalteco, según han anunciado los directivos de la empresa periodística, cuyo presidente y fundador está encarcelado bajo cargos de lavado de dinero.
Y es que la estrategia parece ser un guion que aplican los gobiernos totalitarios o con ribetes de tal, como el de Guatemala, con Alejandro Giammattei a la cabeza; de el Salvador, con Nayib Bukele y el que ha resultado más agresivo contra la prensa independiente, Nicaragua, con el dictador Daniel Ortega al frente.
La crisis que resiste la libertad de prensa y expresión en Centroamérica es alarmante. Ahora fue elPeriódico, en Guatemala, que dejará de publicar “cualquier tipo de información” el próximo 15 de mayo.
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La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en un comunicado divulgado este viernes, tras conocerse el cierre del medio guatemalteco lamentó la situación y consideró que se trata de “un paso atrás para la democracia en Guatemala”
La SIP agrega que «es tarea esencial de la prensa independiente fiscalizar a los poderes públicos». Sin embargo, es precisamente esa acción la que incomoda a los gobiernos que aplican una misma estratega para tratar de estrangular la libertad de prensa y de expresión: persecución judicial, ahogo económico y obligan a los comunicadores al exilio.
elPeriódico señala directamente al gobernante guatemalteco de haber orquestado “un montaje” para llevar a la cárcel al director fundador del medio, José Rubén Zamora, y luego bloquear todo posibilidad de acceder a publicidad. Giammattei es «alérgico a la fiscalización de los medios de comunicación», confirmó a Artículo 66 la periodista Julia Corado, editora de elPeriódico.
Pero ese mismo guion aplica Bukele en El Salvador. Incómodo por los señalamientos de mala actuación gubernamental, sobre todo del medio de investigaciones El Faro, Bukele lanzó a su aparato gubernamental sobre el medio.
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En septiembre de 2020, el mandatario salvadoreño anunció en cadena nacional, que su Ministerio de Hacienda iniciaría una investigación por Lavado de dinero contra El Faro. Desde entonces, los ataques contra este y otros medios, que se han atrevido a fiscalizar la administración de Bukele, se ha agudizado..
Se ha conocido incluso de casos de espionaje contra periodistas en El Salvador, aunque Bukele lo ha negado. Amnistía Internacional dio a conocer un informe que lista «35 casos de periodistas y miembros de la sociedad civil» que fueron presuntamente espiados con el programa Pegasus, contratado por el gobierno salvadoreño.
Nada diferente ha ocurrido en Nicaragua, solo que, en este país, el dictador Ortega no ha disimulado en nada. El régimen orteguista arremetió contra el canal de televisión 100% Noticia, la revista Confidencial, el programa Esta Semana y La Prensa, los que confiscó. También atacó a Radio Darío, el Canal 12 y todos los medios de comunicación independientes que se atrevieron a hurgar en el Gobierno y sus malas actuaciones.
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La arremetida del dictador Daniel Ortega contra la prensa independiente fue tal, que actualmente todos los medios que no se le sometieron están en el exilio. Ortega es considerado por la organización Reportero Sin Fronteras como uno de los más connotados depredadores de la libertad de expresión en el mundo.
Además, según valoró Carlos Jornet, presidente de la Comisión de libertad de expresión de la SIP, en una entrevista con France 24, «en materia de libertad de prensa, Nicaragua no se limita a ser el peor alumno de la región: también es su mejor maestro. Está armando un manual preciso para implementar el acallamiento de la prensa que otros gobiernos parecen seguir», eso constituye una preocupación para la organización defensora de la libertad de prensa.
