Con 80 votos a favor, 10 en contra, y uno presente, los diputados de la Asamblea Nacional, bajo órdenes de Daniel Ortega, aprobaron este martes, dos de mayo, un acuerdo de cooperación entre Nicaragua y Rusia para el desarrollo de energía atómica «con fines pacíficos».
El diputado oficialista Wálmaro Gutiérrez sostuvo que con la aprobación de este acuerdo la calidad de vida de los nicaragüenses mejorará, debido a que «a traves del desarrollo de la tecnología, al desarrollo de la técnica, de la invención, del conocimiento ha habido muchísimos otros países que han venido experimentando y encontrando en la energía atómica la utilización de la misma para mejorar los niveles de vida de la humanidad, y es a esa utilización con fines pacíficos a las que se refiere este convenio internacional».
«Esto es un paso sumamente importante para las y los nicaragüenses y consideramos que en el marco de garantizar mejores tecnologías para garantizar mejores prácticas de inocuidad de nuestros alimentos, para mejorar la producción y la productividad de nuestros alimentos, (…) en fin para una gran variedad de usos, es muy positivo este tipo de herramientas», sostuvo.
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«Nicaragua no puede quedarse al margen de esos avances de la tecnología pacífica, del uso pacífico, del uso de la energía nuclear», agregó, sin ahondar en el uso que hacen países aliados de la dictadura sandinista para amenazar al mundo con armamento nuclear.
El pasado 13 de abril, Daniel Ortega presentó ante la Asamblea Nacional la iniciativa de decreto legislativo de aprobación del «Acuerdo entre el Gobierno de la República de Nicaragua y el Gobierno de la Federación de Rusia sobre la cooperación en el campo de las aplicaciones no energéticas de la energía atómica con fines pacíficos», para que se concediera el trámite de formación de ley.
La justificación de Ortega, para mandar la iniciativa de ley, se basó en que «el uso de la energía atómica con fines pacíficos representa para la humanidad una oportunidad para atender y enfrentar problemas globales».
Además, señaló que el uso de esta energía contribuye «a los Estados al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), aprobados en la Organización de Naciones Unidas en el año 2015».
La firma del acuerdo de cooperación entre Rusia y Nicaragua se efectuó en la capital rusa, Moscú, el pasado 29 de marzo.
El jefe de la corporación de energía nuclear Rosatom, Alexéi Lijachov, participó en la firma representando a Rusia, mientras que la dictadura orteguista mandó a una delegación encabezada por el canciller Denis Moncada para suscribir el acuerdo.
La comisión la integraban el hijo de la pareja presidencial, Laureano Ortega; el subdirector de la Policía Nacional, comisionado general Zhukov Serrano; y el inspector general del Ejército de Nicaragua, Marvin Corrales.
El pasado 21 de noviembre, Rusia y Nicaragua firmaron una hoja de ruta para el uso de energía atómica con fines pacíficos, al trazar las directrices de la cooperación.
Nicaragua y Rusia ya se habían comprometido para cooperar en el campo de la energía atómica en diciembre de 2021, aunque fue hasta octubre del año pasado que Daniel Ortega, autorizó la firma de una hoja de ruta.
El Gobierno de Nicaragua espera que la cooperación rusa fortalezca «las capacidades de los profesionales, especialmente en el campo de la medicina, energía hidráulica, geotérmica y eólica».
Aunque ahora que el acuerdo con Rusia está «enmelado» con argumentos relacionados al «uso pacífico» de la energía atómica, el dictador Daniel Ortega ya ha expresado su interés de meterse a esos asuntos con «fines militares».
El 23 de junio de 2021, el propio Ortega salió en una de sus acostumbradas apariciones para despotricar contra Estados Unidos. Ahí mismo reclamó el derecho que tiene su régimen de «desarrollar la energía atómica con fines pacíficos y fines militares».
«Es cierto que nosotros hemos declarado toda esta región como una zona de paz, lo que implica no desarrollar armamento atómico, pero si vamos a ver en justicia, con qué derecho y a cuenta de qué, solamente los países ricos tienen derecho de armarse con armas atómicas… si vamos a actuar con justicia, tanto derecho tiene un país para buscar desarrollar la energía atómica para fines pacíficos o para fines militares, igual derecho tiene también un país en vías de desarrollo de desarrollar energía atómica para fines pacíficos y fines militares», justificó Ortega en ese entonces.
La ignorancia es abusiva.
Este ESPERPENTO APESTOSO, ñañiel Ortega, y su mujer, la piltrafa de sarro, Rosado el Fundillos, a duras penas, aprendieron a medio leer.
No tiene, ni la menor idea, de las consecuencias de hacer negocios con RAS- PUTIN.