El cuerpo del leonés José Domingo Hernández Maradiaga fue repatriado a Nicaragua después de dos meses de su deceso en Estados Unidos. Sus restos fueron recibidos la tarde del viernes en el barrio Sutiaba, y este fin de semana fue sepultado en el cementerio San Francisco de Asís de esa localidad.
El 20 de febrero, Hernández y su primo, Marvin Padilla, fallecieron luego de que un tren de la Línea Azul del Metro, impactó contra el automóvil en el que ambos se transportaban en Los Ángeles, Estados Unidos. Habían salido de Nicaragua en octubre de 2022 en busca de un trabajo en el país norteamericano para ayudar a su familia.
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Robin Miguel Ramírez, quien es coordinador de la Pastoral Juvenil Effetá, de la parroquia la Cruz del Calvario, en Estelí, fue detenido por la Policía de Nicaragua desde el pasado 13 de abril.
El joven también coordinaba las pastorales juveniles del Decanato Clemente Carranza y era el encargado del Área de Formación a nivel diocesano. Al momento de apresarlo, los oficiales de la dictadura llegaron hasta la vivienda de Ramírez, «lo enchacharon» y lo subieron a la patrulla. Después de 11 días todavía no se ha admitido la entrega de alimentos, según denunciaron cercanos.
La familia del adolescente de iniciales E.M.B, de 17 años, decidió sacarlo de Nicaragua tras ser detenido arbitrariamente por la Policía de Morrito, municipio de Río San Juan, por supuestamente publicar en su cuenta de Facebook un post en referencia a las protestas sociales de abril de 2018 contra el régimen Ortega-Murillo.
Una fuente bajo anonimato detalló al equipo de Artículo 66 que el joven fue arrestado el pasado 19 de abril, en el marco de la conmemoración del quinto aniversario de la Rebelión Cívica de abril 2018. Ese mismo día, los oficiales trasladaron a E.M.B. de la delegación policial de Morrito a la de San Carlos, en donde horas después fue entregado a su mamá.
La madre del menor, quien reside en Costa Rica, decidió sacar a su hijo del país para evitar una situación peor a futuro, según indicó la fuente.
El Ministerio de Gobernación (Migob) continúa con las aniquilaciones de universidades. Este lunes, a través de una publicación en La Gaceta, oficializó la cancelación de la personalidad jurídica de la Universidad Metropolitana (Unimet), Universidad del Norte de Nicaragua (UNN) y la Universidad Adventista de Nicaragua (Unadenic).
Sus bienes pasan a manos de la dictadura de Daniel Ortega. Con estas tres ilegalizaciones suman más de una veintena de entidades de estudios superiores «descabezadas». Alegan incumplimiento en los planes de estudio, no cumplimiento de la ley y en el caso de la Unimet apuntan que falseó información ante el CNU y CNEA.
Diez mujeres policías nicaragüenses fueron cambiadas de cargos en las distintas direcciones departamentales de esa institución, así lo informó la División de Relaciones Públicas de la Policía Nacional. Estos son los primeros cambios públicos que el régimen de Daniel Ortega realiza en mandos de mujeres policiales, en el contexto represivo que vive Nicaragua, desde el 2018.
