Quienes conocieron a Jenelieth Peña López, en el municipio de Camoapa, amanecieron en silencio. En la calle donde ella vivió, los pobladores visten ropa negra y caminan lentos, con sus rostros desencajados y flores entre sus manos. Muchos lloran. Otros transpiran ira. No creen que la joven con tan solo 19 años vaya en ese ataúd. «Apenas comenzaba la vida», expresó un pariente visiblemente dolido.
La familia de la joven está devastada. Ahora ella es parte de una estadística gris en Nicaragua: en lo que va del año, al menos 19 mujeres han sido asesinadas con saña en el país y en muchos casos, los agresores han logrado escapar de la justicia.
El cuerpo de Peña López fue encontrado por unos niños que buscaban mazamorras para pescar, la mañana de este miércoles. Estaba boca abajo y sin camisa, al fondo de un cauce ubicado en Villa Nueva, cercano a Ticomo, en el Distrito Tres de Managua.
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«Es doloroso para la familia y para todos los que estamos aquí, que conocemos a la familia y conocimos a la muchacha», manifestó un vecino mientras caminaba junto al carro fúnebre.
«Es algo triste que le haya sucedido a una persona joven, pedimos todo el peso de la ley», dijo el hombre, quien luce molesto y consternado por el crimen.
«Estamos bien dolidos, queremos justicia, que den con el paradero de esos criminales, que no quede impune», expresó otro familiar de la víctima.
La comisionada general Thelma Collado, en declaraciones a la oficialista Radio Ya, dijo que el cuerpo presentaba un golpe en la cabeza. El cadáver estaba cubierto por varias ramas secas. La Policía encontró en un bolso que estaba cerca del cuerpo, su cédula de identidad y el pasaporte de la joven.
Iba a entrevista de trabajo
El cuerpo de la joven Jenelieth Peña López, fue sepultado en el cementerio municipal de Camoapa, en el departamento de Boaco.
Amy González, amiga de la víctima, compartió que la joven se había hospedado en su vivienda, mientras encontraba un empleo. Dijo que el lunes reciente, por la mañana, salió en busca de un certificado de salud, pero no regresó.
«Ella salió de la casa y desde ahí no sabemos nada. Me dijo que iba a ver una amiga al barrio Camilo Ortega, pero no llegó y luego avisó que le habían ofrecido un trabajo y que iría a la entrevista, que era noche, pero que asistiría. Y ese es el mensaje que vemos raro, porque a esa hora, no existen las entrevistas», expresó González tras enterarse de la muerte de la joven.
González además compartió que la infortunada era una chavala «alegre» y «llena de vida», por lo que lamenta que la hayan asesinado. «Toda la gente que la conoció sabe cómo era ella. Era muy buena, nosotros sospechamos que la engañaron por su inocencia y no percató la maldad del que le haría daño», lamentó su amiga.
Por Voces Unidas
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