La Organización de Estados Americanos (OEA) anunció este lunes que su Consejo Permanente analizará situación de Nicaragua mediante sesión ordinaria en la que estará presente Tamara Dávila, una de las expresas políticas liberadas y expulsadas a Estados Unidos por decisión del régimen de Daniel Ortega.
El organismo internacional anunció que la reunión se celebrará el próximo miércoles, 29 de marzo, bajo el título de «la situación de desacato permanente del Estado de Nicaragua y la desprotección absoluta de los beneficiarios de las medidas provisionales de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH)», refiere el documento.
Noticia relacionada: Corte IDH ordena medidas provisionales para 11 presos políticos de Nicaragua
En noviembre de 2022, la Corte Interamericana declaró a Nicaragua en «desacato permanente» a las órdenes de liberar a opositores encarcelados y anunció que elevará la situación a la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos.
La Corte IDH manifestó en su pronunciamiento de noviembre pasado que “la detención de los beneficiarios de las medidas provisionales, así como los procesos penales seguidos en contra de todos ellos, evidencian un proceso de hostigamiento y criminalización de las personas que se identifican en oposición al actual gobierno de Nicaragua”.
En entrevista al medio internacional EFE, Tamara Dávila expresó que denunciará «al régimen de Ortega y Murillo, que sigue con una política de represión y hostigamiento bajo una directriz casi en paralelo al nazismo».
«Voy a hablar de lo que hemos sufrido, de la política de represión que el régimen ha utilizado y que ahora está reeditando con los destierros y expatriaciones de nicaragüenses. Es muy importante que el mundo siga actuando y que América como continente siga presionando por todas la vías posibles de manera cívica para que el régimen pueda transitar hacia una salida democrática», añadió la defensora y activista.
Así mismo, demanda que la comunidad internacional continúe «haciendo, presionar al régimen, condenarlo, presionar para que Ortega y Murillo y quienes hayan cometido crímenes de lesa humanidad sean castigados. Ningún país del mundo puede ver a otro lado cuando se comente una injusticia».