El régimen de Daniel Ortega recapturó al exreo político Pedro José Gutiérrez González, de 39 años, luego de salir a una calle de Managua el pasado 10 de febrero a pedir la libertad del obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, monseñor Rolando Álvarez.
Gutiérrez fue enviado a juicio mediante un proceso totalmente desconocido para sus familiares. El ciudadano fue detenido y acusado ante la jueza orteguista, Karen Chavarria del Juzgado Noveno de Distrito Penal de Audiencias de Managua. La justicia orteguista no detalla los supuestos delitos por los que lo acusan, solo señala como víctimas al Estado y la sociedad nicaragüense.
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El nuevamente preso político pedía la libertad del obispo de Matagalpa y expresaba su opinión en sus redes sociales. El último video que publicó en Facebook lo realizó el 10 de febrero, un día después que la dictadura desterrara a 222 presos políticos, y condenara sin juicio al líder religioso, quien rechazó el destierro.
En el video, Gutiérrez clamó por la libertad del jerarca religioso y su petición se volvió viral en redes sociales, situación que incomodó a la pareja presidencial y ordenó la captura del ciudadano.

Ese día, Pedro Gutiérrez salió a las calles con un rosario en mano y gritó: «¡Ánimo, fuerza y fe siempre! Libertad para monseñor Rolando Álvarez, aunque la dictadura le haya dado 26 años de cárcel, nosotros consideramos a Rolando Álvarez un sacerdote del pueblo. ¡Viva Nicaragua!».
Sus familiares aún desconocen el día en el que se realizará el juicio en contra del ciudadano.
Pedro Gutiérrez es mecánico industrial y fue secuestrado, por primera vez, en un taller de mecánica en el barrio Villa Reconciliación, en el que se encontraba laborando el cuatro de julio de 2018. Estuvo 18 meses encarcelado. En septiembre de 2019, sus familiares denunciaron ante organizaciones de derechos humanos nacionales el maltrato físico y psicológico al que estaba siendo sometido por los carceleros orteguistas en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, conocido como «La Modelo».
El preso político tiene solo una pierna y se vale de una prótesis para caminar. El 30 de diciembre de 2019, el régimen orteguista lo envió a su casa bajo la condición de convivencia familiar. En ese entonces, Gutiérrez era acusado, junto a otros dos exreos políticos, de los supuestos delitos de robo agravado y secuestro simple hasta que fueron declarados inocentes en 2020.