La presa política Samantha Jirón cumple hoy lunes, 16 de enero, 23 años. Se encuentra alejada de su familia, sin poder recibir un abrazo, ni las felicitaciones de su madre, amigos y familiares porque la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo la mantiene secuestrada en las celdas del Sistema Penitenciario de Mujeres, La Esperanza, en Tipitapa.
Este es el segundo cumpleaños de la rea de conciencia entre «barrotes y custodios». Jirón fue detenida el pasado nueve de noviembre de 2021 por agentes policiales, en el marco de las votaciones generales donde la pareja dictatorial se impuso nuevamente en la Presidencia, en unas elecciones consideradas «ilegítimas».
En esta fecha especial, la Unidad Juvenil y Estudiantil -de la Unidad Nacional Azul y Blanco (Unab)- recordó el cumpleaños de la joven opositora resaltando su «lucha» por promover la libertad de prensa en el país.
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«Hoy Samantha Jirón está cumpliendo 23 años bajo las celdas de la prisión La Esperanza, lejos de su familia y seres queridos por promover una prensa libre y transparente en Nicaragua», escribió el bloque opositor en su cuenta de Twitter.
Asimismo, la Alianza de Jóvenes y Estudiantes Nicaragüenses (AJEN) manifestó que desean que el «proximo cumpleaños» de Jirón «sea en libertad».
Samantha Jirón fue sentenciada a ocho años de cárcel y a pagar 30 mil córdobas de multa por los supuestos delitos de «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional» y por cargos de conformidad con la Ley de Ciberdelitos. Actualmente, es la presa política más joven en las celdas del régimen.
Como pruebas para su judicialización, la justicia orteguista presentó entrevistas en vídeo que brindó a medios de comunicación internacionales y nacionales, donde habló de temas de interés y dominio público como la pandemia del COVID-19 y la crisis política que vive el país. Los peritos policiales alegaron que esas declaraciones «atentaron contra la patria».
La rehén de la dictadura, en más de 14 meses de encierro arbitrario, también ha sido sometida a tratos diferentes a los de las demás encarceladas, pues le prohíben salir al patio del penal La Esperanza y tampoco tiene autorización para escuchar noticias a través de la radio.
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo mantiene en prisión a 230 opositores encarcelados en distintas cárceles del país. Todos son sometidos a tratos crueles, inhumanos y degradantes, según han denunciado sus familiares.