Tras más de 18 meses de mantener en cautiverio a la presa política Suyen Barahona y de negarle la comunicación con su hijo, de cinco años, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo autorizó una llamada entre madre e hijo este domingo, 25 de diciembre, durante la jornada de visitas número 13 a los opositores encarcelados en las celdas del Complejo Policial Evaristo Vásquez, conocido como «El Nuevo Chipote», en Managua.
En un comunicado, los familiares de Suyen Barahona detallaron que la presidenta de Unamos «pudo ver fotos del niño y recibió una carta. Finalmente, después de un año y medio, pudo tener una llamada con su hijo. Fue un momento tan esperado por ambos».
Asimismo, subrayaron que «durante la visita hubo un trato respetuoso, que esperamos siga siendo la práctica diaria y que la comunicación continúe fluyendo, según derecho, y para el bienestar del niño».
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«Suyen se encontraba con su usual fortaleza de espíritu. Por supuesto, el mayor anhelo tanto de su pequeño como de la familia sigue siendo el abrazarla en libertad, porque Suyen y las más de 235 personas presas políticas son inocentes», resaltó la familia de la líder opositora, quien permanece encarcelada desde el pasado 13 de junio de 2021.
Cabe destacar que tanto César Dubois, esposo de Barahona como su hijo están fuera de Nicaragua a raíz de la detención arbitraria en contra de la activista política.
Por otra parte, la campaña #UnaLlamadaParaSuyen rindió «frutos», debido a que fue posible que la presidenta de Unamos se comunicará con su pequeño. La virtualidad permitió que la madre y su hijo de cinco años se reencontraran después de más de 18 meses separados forzosamente.
Durante más de 18 meses, las autoridades de «El Nuevo Chipote» impidieron que las cartas y dibujos del niño le fueran entregados a su mamá, pese a que al abogado de la rea de conciencia ha interpuesto recursos ante el Tribunal de Apelaciones de Managua y ninguno ha sido contestado.
Suyen Barahona fue condenada por Ulisa Yaoska Tapia Silva, titular del Juzgado Décimo Tercero de lo Penal de Juicio de Managua, a ocho años de prisión por el delito de «menoscabo a la integridad nacional» a la disidente sandinista, además la inhabilitó para ejercer cargos públicos.
Para el 31 de diciembre está programada otra visita que las autoridades policiales anunciaron a los presos políticos cautivos en «El Nuevo Chipote», con motivo de las fiestas de año nuevo.