Pedro Castillo, quien intentó implantar un “gobierno de excepción”, fue detenido por las autoridades policiales de Perú. El entonces jefe de Estado dictó hoy, siete de diciembre, disolver temporalmente el Congreso e instaurar un Gobierno de emergencia nacional, horas antes de que el Parlamento debatiera una moción de vacancia (destitución) en su contra que podría haberlo apartado de la jefatura del Estado.
Según información de medios locales, la policía peruana lo arrestó cuando Castillo intentaba huir junto con su familia hacia la embajada de México. Las medidas orientadas por el expresidente causó el repudio de los funcionarios de los Poderes de Estado, la vicepresidenta de la nación así como de la comunidad internacional.
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El pleno del Congreso de Perú lo destituyó este mismo miércoles por “permanente incapacidad moral” con 101 de 130 votos a favor, después de que este anunciara la disolución del Legislativo y declarara un Gobierno de excepción de emergencia, lo que fue calificado como un golpe de Estado por diferentes voces, incluida la vicepresidenta.
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