Feligreses en Nicaragua se preparan para celebrar la Gritería en honor a la Inmaculada Concepción de María, tradición religiosa que se realiza cada siete de diciembre, sin embargo; la carestía de la vida ha hecho que la «gorra» o los brindis se reduzca y la celebración sea más austera.
Este 2022 no ha sido la excepción para que muchos devotos coticen para ver si pueden instalar el altar y «gritarla», debido a que expresan cada vez los precios de los productos van en aumento.
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En entrevista con Artículo 66, creyente expresaron que su «fervor religioso nos ha hecho a que ahorren todo el año para poder festejar aunque sea par de horas a la madre Dios, ya que todo está caro.
Melba Chicas, quien por 37 años ha celebrado la Gritería, manifestó que este 2022 no será como otros años donde el brindis era mayor y duraba por más de seis horas instalada la imagen.
«Sí la voy a celebrar porque es una promesa que hice desde que me operaron de la vesícula, voy a hacer mi cajeta negra, que ya es una tradición de todos los años; la pondré un ratito nada más para no perder la tradición, no como otras veces que la quitaba ya tarde», dijo.
En cuanto a la devoción a la Virgen María, la fiel manifestó que la tradición continúa pese a los obstáculos que se presentan, especialmente en la economía del país. «Desde que comenzó el novenario el 28 de noviembre, la gente la está rezando y los que acostumbran a dar el brindis ya están haciendo sus compras»., resaltó
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Otra devota originaria de Masaya expresó que «la celebraré y en grande, porque la hago con colaboración de todos los vecinos y familiares».
Productos han incrementado de precio
En cuanto a los productos que tradicionalmente los devotos compran para obsequiar a las personas que llegan a gritar la Purísima, otra fuente en condición de anonimato expresó que «todo ha incrementado de precio».
«Año con año todo sube, todo lo que es plástico —vasos, panitas, entre otros— aumentó de precio, al igual que los bananos. La caña está por las nubes; casi nadie va a dar caña porque es un lujo, al igual que las naranjas y los limones dulces», informó.
Por su parte, una vendedora del mercado Ernesto Fernández de Masaya, indicó que actualmente el 100 de bananos se cotiza a 120 «el más económico y el más hermoso (de mayor tamaño) a 150, pero te lo dejo a 140».
Mientras que la naranja dulce cuesta 300 córdobas la pequeña y a 500 el 100 de la grande. En tanto el 100 de limones dulces está a 800 córdobas y la varilla de caña se cotiza a 150, lo que significa que por docena cuesta 1, 800 córdobas.
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Por otra parte, los vasos varían de precio, «los vasos económicos cuestan 120 la docena, los de mayor calidad, lo encuentra a 250 y 300 córdobas, las panas pequeñas cuestan 120 la docena
A pesar que este año la dictadura de Daniel Ortega ha arremetido contra la Iglesia católica, los feligreses han afirmado que es «cuando más se debe de confiar en la virgen y apoyar a nuestros sacerdotes».
Hasta el momento, el régimen de Nicaragua mantiene encerrados a 12 sacerdotes, incluyendo a monseñor Rolando Álvarez, sin embargo, a diario la vicedictadora Rosario Murillo proclama su cuestionada religiosidad y ha instalado altares religiosos en la Avenida de Bolívar a Chávez.