La vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, sigue su celebración tras la votaciones municipales del seis de noviembre, donde su régimen se apropió sin competencia política de las 153 alcaldías del país.
En referencia al acto de ayer, ocho de noviembre, en el polideportivo Alexis Argüello por el «triunfo» del cuestionado proceso municipal, la portavoz de la dictadura felicitó a los integrantes de la Juventud Sandinista (JS) que vitorearon al dictador Daniel Ortega y a ella.
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«Cuánta alegría ayer en ese concierto y ese hermosísimo acto de nuestra juventud, esa juventud que sentíamos vibrar con el orgullo de nuestra historia y eso es lo que a mí me impresionó muchísimo», expresó la vicedictadora.
Asimismo, recalcó que «esa demostración de amor patrio, de compromiso, de disposición de nuestra juventud de continuar la obra que a lo largo de la década y de los siglos hemos venido asentando las y los nicaragüenses, por eso nosotros hablamos de tiempos históricos y estratégicos».
Afirmó sentirse orgullosa porque se está resguardando y defendiendo la paz y el bienestar «al que tenemos derecho todas y todos los nicaragüenses. Tenemos el compromiso de seguir construyendo el porvenir que merecemos, que queremos, que soñamos; el porvenir de todos, la unidad de todos, porque es unida que Nicaragua triunfa».
Una vez más reafirmó que las cuestionadas votaciones fueron «una demostración de esa unidad que nos hace triunfar a todos (…) Estamos resguardando la paz que tanto nos cuesta y sabemos que la lucha continúa y sabemos que las victorias son ciertas porque estamos juntos todas las generaciones de nicaragüenses».
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«Seguimos vigilantes siempre porque nadie puede arrebatar esta paz que nos pertenece», concluyó.
Esa apropiación de las alcaldías y la imposición de un partido único ha recibido críticas a nivel nacional e internacional, en las que reprochan el autoritarismo, el aplastamiento a la institucionalidad y a las libertades consignadas en la Constitución Política de Nicaragua.
El observatorio Urnas Abiertas confirmó que solo un 17 % de nicaragüenses acudió a las juntas receptoras de votos; muchos lo hicieron obligados por el régimen ante advertencias de represalias.
El equipo multidisciplinario también indicó que estas votaciones estuvieron marcadas por arrestos arbitrarios de opositores con un total de 19 detenciones registradas en seis departamentos del país, desde el primero de noviembre.
