El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) informó que Mildred Rayo y Miguel Flores, integrantes de la Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN), se encuentran recluidos en las celdas del Distrito tres de la Policía en Managua.
Según la denuncia, ambos opositores fueron interceptados a las 6:30 de a mañana del martes, primero de noviembre, por miembros del Ejército de Nicaragua, en las cercanías del río Sapoá, en Cárdenas, en el departamento de Rivas, cuando se movilizaban con dirección a Managua.
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Tras informar que los integrantes de AUN están en la estación policial y a la orden de la Dirección de Auxilio Judicial, el Cenidh señaló que se presentó recursos de exhibición personal a favor de los mismos.
«Exigimos al régimen Ortega-Murillo respete la integridad personal y la vida de estas personas. Desde Cenidh estamos acompañando a los familiares e informamos a las organizaciones internacionales de #DDHH @CIDH @OACNUDH», refirió el organismo.
Artículo 66 intentó comunicarse con familiares y directivos de la la Alianza Universitaria Nicaragüense para conocer más detalles, sin embargo solo se informó que a Mildred Rayo «sí se le permitió que sus familiares le ingresaran ropa».
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Tras conocerse la detención arbitraria, una fuente de la organización aseguró que al momento de la detención Rayo venía de Costa Rica y Flores la fue a encontrar en el sector de Cárdenas, sin embargo Ejército los interceptó y los detuvo. Además, aclaró que «ellos no estaban exiliados».
Por su parte, AUN denunció a través de un comunicado que «a través de geolocalización, pudimos ubicar el celular de Mildred Rayo y le dimos seguimiento a su traslado…».
«Miedo a la juventud»
La organización opositora señaló en su momento que este zarpazo de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo es un reflejo del miedo que le tienen a una «juventud organizada y convencida en una lucha justa y cívica».
«Esta persecución no es solo contra nuestra organización, sino contra toda Nicaragua», resaltó la organización opositora al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Antes de esta detención, se contabilizaban 219 presos políticos cautivos en las diferentes cárceles del país. que son acusados por delitos comunes o por supuesta traición a la patria.
