La jueza sandinista María Concepción Ugarte, del Juzgado Sexto Penal de Vigilancia y Ejecución Penitenciara, se exilió en Estados Unidos, así lo confirmó a Artículo 66 el defensor de derechos humanos Pablo Cuevas.
La judicial, que en 2008 era Juez Segundo Distrito Penal de Audiencias de Managua, ordenó varios allanamientos a distintas organizaciones no gubernamentales, entre las que destacan el Centro de Investigaciones de la Comunicación (Cinco) y el Movimiento Autónomo de Mujeres (MAM).
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Según el defensor, un familiar de la judicial le informó que el viernes, 28 de octubre, se exilió. Salió por punto ciego a un país vecino —sin especificar— y posterior abordó un avión hacia el país norteamericano.
Acerca de los motivos que la obligaron a desertar del Poder Judicial de Nicaragua, Cuevas señaló que «ya se sentía cansada» de laborar y seguir órdenes del régimen de Daniel Ortega.
En cuanto a la situación de Ugarte y las acciones que tomará si desea solicitar asilo político en el país norteamericano, el defensor de derechos humanos explicó que la juez se ve «en dos aguas bravas».
«Está mal con el régimen porque la ve como traidora y por otro lado —la oposición— la ve como colaboradora y verdugo. Entonces mi sentido común me dice tiene que colaborar con el esclarecimiento de situaciones abusivas contra los derechos humanos», aclaró.
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Una de las acciones abusivas que señaló Cuevas y sobre las que tiene que rendir cuentas «es por el desmantelamiento del sistema democrático a través de la separación de poderes, en efecto sabemos que eso existe, pero es escasa la prueba documental del interior».
«La doctora a como muchos trabajadores del Estado se hastió y según sus familiares, ella maneja información y tiene pruebas del interior de los juzgados, lo que sería de mucha importancia», agregó el director de la Defensoría Nicaragüense de Derechos Humanos.
Además, subrayó que si la abogada tiene una circular «donde alguien le dice que por órdenes de la compañera —vicedictadora Rosario Murillo— se debe de acatar una orden, es una prueba contundente».
En cuanto a que si las autoridades de EE. UU. la deporten por su complicidad con el régimen de Nicaragua por violar los derechos de los nicaragüenses, Pablo Cuevas recalcó que Concepción Ugarte debe de «informar» a la justicia de Estados Unidos acerca de cómo trabaja a lo interno el orteguismo y poder esclarecer su situación.
Al igual que Ugarte han habido otros jueces que también han tomado la decisión de salir del país para no seguir «colaborando» con la dictadura, entre ellos está la jueza de Nueva Guinea, Liseth de los Ángeles Santamaría Duarte, y el juez de Chinandega, Roberto Zúñiga, originario del municipio de Puerto Morazán-Tonalá, en el departamento de Chinandega.
