El Gobierno del presidente Joe Biden prohibirá a los ciudadanos de Estados Unidos hacer negocios con la industria del oro nicaragüense como medida para ejercer presión a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, revelaron funcionarios norteamericanos a la agencia de noticias Associated Press (AP).
Esta medida estará en vigencia a través de una orden ejecutiva que firmará en los próximos días Biden. Además de las restricciones comerciales también se espera el anuncio del retiro de visas a unos 500 funcionarios y allegados al régimen de Managua.
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«Es la más reciente y quizás la más agresiva medida de Estados Unidos para castigar al exlíder guerrillero sandinista (Daniel Ortega) por sus continuos ataques contra la democracia y los derechos humanos en el país centroamericano y por su cooperación en materia de seguridad con Rusia», señala la AP.
La orden ejecutiva de la administración estadounidense declara que las violaciones de normas democráticas en Nicaragua, los atentados contra el estado de derecho y el uso de la violencia contra opositores es una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos.
Estas acciones de Biden se dan en un contexto de mayor aislamiento de la dictadura de Nicaragua de la comunidad internacional cuando ha tensado las relaciones diplomáticas con la Unión Europea, Holanda y el país norteamericano. También, se abre el camino para que el gobierno de Estados Unidos bloquee las inversiones y el comercio con Nicaragua. Otras industrias se podrían ver afectadas si EE. UU. decide ampliar las restricciones contra el régimen de Ortega y Murillo.
«La decisión de Biden de enfocarse en la industria aurífera nicaragüense podría privar al gobierno de Ortega de una de sus principales fuentes de financiamiento. El oro fue la principal exportación del país en 2020 y el país, ya el mayor productor del metal precioso en Centroamérica, busca duplicar la producción en los próximos cinco años», destaca la agencia.
Estados Unidos se ha consolidado a lo largo de los años como el principal socio comercial de Nicaragua, todo esto pese a la política de ataques verbales y arrebatos diplomáticos que el régimen Ortega-Murillo mantiene desde su llegada al poder en 2007.
Entre enero y julio de 2022, Nicaragua registró exportaciones por el orden de los 3,200 millones de dólares, mientras que las importaciones se situaron en 1,500 millones de dólares. Estas cifras reflejan un superávit de 1,700 millones de dólares favorables para Managua.
El 2020, Nicaragua registraba un superávit comercial con Estados Unidos de 2 mil 139 millones de dólares o 17 % del Producto Interno Bruto (PIB). «Nicaragua vende más de lo que compra a EE. UU., creando empleos y crecimiento económico para Nicaragua», resaltó en meses pasados la embajada de Estados Unidos en Managua en su cuenta de la red social.