El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo anunció que este próximo jueves, 20 de octubre, van a «celebrar» el 43 aniversario del Ministerio de Gobernación (Migob) y que «ya circulan las invitaciones» para el evento que se realizará en el Plaza de la Revolución en Managua.
El Ministerio de Gobernación de Nicaragua se ha convertido en la principal herramienta de la dictadura para perseguir, reprimir y cancelar a las organizaciones no gubernamentales que trabajaban diversos programas y proyectos en todo el país.
El pasado 11 de agosto, la Asamblea Nacional controlada por el orteguismo aprobó con 77 votos a favor, una reforma y adicción a la Ley 1115, que le dio el poder absoluto a Gobernación para despojar de la personalidad jurídica a las organizaciones mediante acuerdos ministeriales, sin necesidad de pasar por el Legislativo.
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La cifra de fundaciones y asociaciones sin fines de lucro ilegalizadas por el régimen se eleva a 2,287 desde diciembre de 2018 a la fecha.
La decisión de la dictadura fue duramente criticada por organismos locales e internacionales de derechos humanos humanos como la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La Policía Nacional, que está bajo el mando de Gobernación, es la encargada de mantener el asedio, persecución, hostigamiento, allanamientos y encarcelamiento de los opositores; además, de mantener la militarización de los pueblos de Masaya, Matagalpa y Managua, entre otros.
La misma Policía es la que captura a los líderes de las organizaciones, activistas, feministas y toda persona que disienta del pensamiento o actuar de la dictadura de Ortega y Murillo. Agentes policiales han sido testigos en los casos contra los rehenes de conciencia y se encargan de las torturas que reciben los que están detenidos en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ).
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También reprimieron las protestas sociales y son señalados de disparar contra los manifestantes en 2018, la cifra de fallecidos ascendió a 355, según ha documentado la CIDH.
La ministra de Gobernación es María Amelia Coronel Kinloch, una miembro del clan Coronel Kinloch que ocupan cargos diplomáticos, de asesores en los ministerios del régimen. La titular del Migob funge en ese puesto desde 2017, pero su carrera pública empezó de la mano del retorno del sandinismo al poder en 2007. Desde ese año hasta su nombramiento en Gobernación, fue ministra consejera con funciones consulares en la delegación de Nicaragua en Panamá.
La Ley 438, Ley de Probidad de los Servidores Públicos, prohíbe y sanciona la práctica del nepotismo en el Estado de Nicaragua, pero el régimen ha violado la norma jurídica al copar los cargos públicos con su propia familia, allegados y funcionarios leales. Un caso de nepotismo es el del clan Coronel Kinloch.