La sancionada jueza Nalia Nadezhda Úbeda Obando, del Juzgado Quinto Distrito de lo Penal de Audiencias de Managua, fijó para el jueves, primero de diciembre, el juicio político contra los cuatro sacerdotes, dos seminaristas y un laico de la Diócesis de Matagalpa, que acompañaron a monseñor Rolando Álvarez en la Curia Episcopal de Matagalpa, asaltada el pasado 19 de agosto.
A la fecha, la justicia orteguista no se ha referido al proceso «arbitrario» al que ha sido sometido el obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, ni tampoco figura en la acusación contra los religiosos. El pasado agosto, la Policía Nacional abrió una investigación en contra del jerarca, a quien señalan de supuestamente «crear grupos violentos para generar desestabilización en el país».
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La Fiscalía acusó a los sacerdotes y seminaristas de Matagalpa por los supuestos delitos de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas a través de tecnologías de la información y la comunicación, en perjuicio de la sociedad y el Estado de Nicaragua.
El fiscal orteguista Manuel de Jesús Rugama fue el encargado de presentar la acusación contra los religiosos.
Los procesados por el régimen de Ortega son el primer y segundo vicario de la catedral de San Pedro, de Matagalpa, José Luis Díaz y Sadiel Eugarrios, respectivamente; así como los sacerdotes Ramiro Tijerino—rector de la Universidad Juan Pablo II—y el padre Raúl Vega González.
Enfrentan la misma situación, los seminaristas Darvin Leiva y Melkin Centeno Sequeira, al igual que el camarógrafo Sergio Cárdenas, los que permanecieron junto a monseñor Álvarez en la sede episcopal desde el cuatro de agosto.
Además, la judicial aceptó a los abogados de confianza de los religiosos. Los sacerdotes Tijerino y Eugarrios están siendo representados por la abogada Nohemí de la Trinidad Guerrero Castrillo.
El seminarista Centeno, el diácono Vega y el sacerdote Díaz son representados por el abogado José Gerardo González Riega.
El camarógrafo Cárdenas es representado legalmente por la abogada Aura Estela Alarcón González y el seminarista Leiva Mendoza será defendido por Norvin Danilo Cruz Ponce.
El obispo de la Diócesis de Matagalpa cumple 72 días de «secuestro» impuesto por el régimen de Daniel Ortega. Hasta el momento se desconoce la situación legal que atraviesa el religioso. Según fuentes, la Policía ha restringido la visita familiar al prelado de Matagalpa y los otros religiosos detenidos en ese contexto también están incomunicados.
La dictadura de Nicaragua se ha ensañado contra la Iglesia católica a los que ha tildado de «diabólicos» y «traidores». Poco a poco, Ortega ha ido engrosando la lista de sacerdotes presos, hasta el momento son más de diez religiosos que están siendo parte de los procesos judiciales en su contra y dos ya fueron condenados.