En el marco del Día Internacional de la Niña, el epidemiólogo y cofundador del Ministerio de Salud (Minsa) de Nicaragua, doctor Leonel Argüello, informó que Nicaragua es el país con más embarazos de preadolescentes de Latinoamérica. El abuso y la violación sexual normalizada aumentan estos casos que, según denuncias, se invisibilizan cada vez más.
El especialista explicó a Artículo 66 que la situación de vulnerabilidad de la niñas víctimas de violencia es grave, porque no se refleja de forma directa, permanente y de manera educativa la realidad que viven las menores.
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También destacó que el país ocupa el segundo lugar, después de Bolivia en América Latina de embarazos en adolescentes.
«En otras palabras, tenemos el deshonroso lugar de ser los primeros en embarazos en preadolescentes —de 10 a 14 años— y el segundo lugar en embarazos en adolescentes», subrayó el galeno.
Este problema se debe, según el doctor Argüello, «a que no existe un seguimiento alrededor de estos casos por parte del Ministerio de Salud, porque si una persona menor de edad sale embarazada eso es un crimen que tiene que ser castigado».
«Actualmente contamos con la pruebas de paternidad o pruebas del DNA que puede perfectamente indicar quién es el padre y quién es la madre y castigar de esa forma castigar a los culpables (…) Sin embargo no se hace esta prueba, no se llega al procedimiento legal que debería llevarse —más bien— a veces hay arreglo, entonces creen que si una niña de esa edad está embarazada es correcto, y eso no puede ser», explicó.
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El especialista destacó que mientras no haya una educación sexual que comience desde las escuelas y desde las casas, seguirán habiendo este tipo de abusos.
«Mientras la sociedad no asuma y no tenga vergüenza de lo que está pasando (…) seguirán habiendo estos abusos, porque una niña no es para que quede embarazada, su cuerpecito no está para eso; un adolescente tampoco y pueden haber una serie de problemas de salud donde se pone en alto riesgo la vida, donde hay momentos que se tiene que decir por la vida del futuro niño o niña o la vida de la madre».
Además destacó todo el efecto psicológico que tiene el abuso y le sometimiento de la menor «que se da frecuentemente dentro de las casas donde se supone que es el lugar mas seguro para las niñas, porque además del embarazo pueden trasmitirse enfermedades de transmisión sexual, como el VIH, gonorreas o sífilis».
Femicidios en adolescentes
En cuanto a los asesinatos de niñas, la Red de de Mujeres contra la Violencia señala que los últimos seis años se han registrado 52 casos de femicidio contra niñas y adolescentes en Nicaragua.
La organización feminista denunció que la desprotección del Estado es visible en la violencia sexual, embarazos en adolescentes, muertes maternas, secuestros y desapariciones constantes de mujeres.
Entre los agresores se encuentran hombres jóvenes y adolescentes; además de hombres adultos; lo que indica según la organización que la educación y la formación de la masculinidad tiene muchas deudas con las niñas, y el respeto a la vida debe forjarse desde la familia, la escuela y la comunidad.
Las feministas también lamentaron que persista la normalización e impunidad ante estos casos por parte del gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
