Este lunes, 15 de agosto, monseñor Rolando Álvarez cumple 12 días bajo asedio policial por orden del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo. El obispo de la Diócesis de Matagalpa permanece encerrado en la Curia Episcopal, junto a 10 personas más, entre sacerdotes y laicos.
El cerco policial de los agentes de la sancionada Policía podría superar los 50 oficiales que mantiene bloqueados todos los accesos a la residencia del religioso.
A los alrededores de la Curia Episcopal, según se aprecia en fotografías y videos, el sitio permanece militarizado por la Policía Nacional, también se ha visto en la zona al sancionado comisionado Ramón Avellán, el fiel servidor de la dictadura que dirigió los violentos ataques contra la ciudad de Masaya en 2018.
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Desde el pasado tres de agosto, el obispo de Matagalpa está confinado en la residencia episcopal, le han impedido salir a oficiar misas, pero eso no ha callado su voz.
El domingo, 14 de agosto, monseñor Rolando Álvarez ofició una misa desde la Curia Episcopal e instó al pueblo de Nicaragua a continuar orando por él y los sacerdotes y laicos que lo acompañan.
Mientras tanto este lunes, el jerarca católico rezó el santo rosario y llamó a los nicaragüenses a ofrecer sus oraciones «por nuestra Iglesia, por nuestros sacerdotes, por nuestra amada patria, por nuestras intenciones personales y hágannos el favor de ofrecerlas también por nosotros, en este doceavo día en el que nos encontramos reunidos y retenidos en nuestra Curia Episcopal».
Además, el religioso invitó a estar pendientes de la página de la Diócesis de Matagalpa, ya que al mediodía transmitirá la «santa eucaristía» y por la noche se continuará con el rezo del rosario.
A casi dos semanas de encierro forzado, el rostro de Álvarez luce cansado, al igual que el de las otras personas que lo acompañan, sin embargo el religioso ha llamado a no desfallecer.
La persecución de la dictadura contra la Diócesis de Matagalpa se agravó el pasado primero de agosto. Ese día el Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correo (Telcor) sacó del aire a todas las radios católicas administradas por monseñor Rolando Álvarez, en un claro ataque de persecución a la libertad religiosa, según han denunciado organismos de derechos humanos, grupos opositores y entidades religiosas de América Latina.
Ortega continúa encarcelando a sacerdotes
La noche del domingo, la dictadura de Ortega mandó a encarcelar a otro sacerdote. La nueva víctima del régimen es el padre Oscar Benavidez, párroco de la iglesia Espíritu Santo, de Mulukukú, Región Autónoma de la Costa Caribe Norte.
Hasta el momento, la Policía orteguista no ha informado las causas de la detención del religioso, quien en las próximas horas cumplirá 24 horas desparecido. Según una fuente, la Policía informó está mañana que Benavidez fue trasladado a Managua.
Una fuente cercana al sacerdote dijo en condición de anonimato a Artículo 66 que la detención se dio en horas de la tarde, luego que el religioso terminó de celebrar misa en la capilla concepción de María, que está cercana a la estación policial del municipio.