Una ciudadana identificada en redes sociales con el nombre de Idania Aracelly Useda Rodríguez, denunció a través de su cuenta en la red social de Facebook, negligencia médica, insultos y burlas por parte de un doctor del centro de salud Sócrates Flores, del municipio de San Marcos, en el departamento de Carazo.
«A un paciente que llega de emergencia a un centro de salud se le atiende a la brevedad sobre todo cuando se va desangrando, si se posterga su espera eso puede significar la muerte», denunció Useda, quien señaló que la noche del martes, 12 de julio su esposo (del cual no mencionó su nombre) fue llevado a emergencia, al centro de salud, inconsciente tras haber sufrido una caída.
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Según el relato, al presentarse en urgencias al paciente lo trataron mal, dejándolo en la silla, sin tomarle los datos personales «ni la presión ni signos vitales, mientras se desangraba». Agrega que «ni la camilla le prestaron por asco a que se ensuciara de sangre».
Señala que el doctor de turno, a quien tachan como el principal agresor verbal, se escondió cuando la ciudadana sacó su celular para dejar constancia de lo que estaba pasando. En el video, la mujer encara al médico que salió de la sala.
«Lo atendió por tanto reclamar, le dijo a la enfermera que le realizara varias puntadas en la cabeza sin lavar, sin anestesia, demostrando asco y regañando a los familiares porque él como doctor no fue capaz de hacer eso. Solo habló para regañar a los familiares porque tardamos en ir a comprar una pastilla, porque allí no tienen ni una sola medicina», detalló.
Otro de los abusos que refiere la esposa del ciudadano fue que el galeno ordenó que los sacaran, aduciendo que estaba lleno el espacio del centro de salud. «Eso me molestó y sobre todo porque mi esposo no podía ni ponerse de pie de tan aturdido, se quedó sentado», subrayó.
Niegan constancia médica
Además señalaron que al pedir al centro de salud una constancia médica de atención para su reposo, el mismo doctor «con arrogancia» le preguntó que si su esposo trabajaba, «porque los reposos los daba el seguro».
«Eso me molestó y todavía de cara dura, con la cara de perro que atienden a los pacientes, me dijo que si quería podía ir con la doctora Silva en la mañana a poner mi queja, palabra que le voy a tomar, porque un paciente no es un perro, y él no es un veterinario», aseveró.
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Idania Useda recordó que el médico que atendió de mala manera a su esposo «hizo un juramento que no está respetando, sino que trabaja por un salario, no por humanismo. Se lo hice ver y mientras sacaba mi teléfono, cobardemente salió hacia afuera y se escondió; mandó a llamar a los guardias de seguridad del centro porque el miserable quería que nos sacarán a la fuerza».
«Nos retiramos bajo la lluvia; el doctor con su risa sarcástica se burlaba en nuestras caras como diciendo: “hagan lo que quieran” (…) Es un error ir a perder el tiempo a un lugar donde lo que se recibe es maltrato de los disque médicos como este, que más que médicos parecen miembros del Ejército de lo tajantes que son», concluyó.
Artículo 66 intentó contactarse con la afectada para conocer más detalles de los hechos acontecidos, sin embargo no se pudo establecer comunicación. Según pobladores de San Marcos y Jinotepe, la falta de atención médica y abuso por parte del personal médico es una problemática constante.
