Organismos y líderes opositores nicaragüenses se unieron al SOS que lanzaron los familiares de la presa política Tamara Dávila, quienes demandan a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo que muestren a la opositora ante el pueblo de Nicaragua y cesen las torturas, tratos inhumanos e incomunicación en su contra.
La plataforma humanitaria Sé Humano denunció que Dávila tiene un año de permanecer en aislamiento total en las celdas de tortura del Complejo Policial Evaristo Vásquez, conocido como «El Nuevo Chipote», «sin poder ver una foto o un dibujo de su hija de 6 años».
«Las condiciones en las que se encuentran las personas presas políticas ponen en riesgo su vida, y es urgente #QueLesMuestrenYa», resaltó la entidad en su cuenta de Twitter.
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Asimismo, la Unión Democrática Renovadora (Unamos) reiteró que Tamara Dávila «está en riesgo» y demandó al régimen de Daniel Ortega abrir «El Chipote» para constatar bajo qué condiciones se encuentran los 190 prisioneros de la dictadura.
Este lunes, 11 de julio, la familia de Tamara Dávila mostró un retrato hablado digital de la presa política a más de un año de su encierro. En la fotografía, presentada por Sadie Rivas, prima de la rehén de conciencia, se ve a la opositora muy demacrada, con ojeras y extremamente delgada.
En la cárcel, la rehén de la dictadura es sometida a mala alimentación, está incomunicada, aislada, sin acceso a horas de sol, sin material de lectura y sin poder ver a su hija de seis años desde su detención.
Luis Carrión, miembro de Unamos, lamentó ver el retrato digital de la opositora. «Duele verte así Tamara (Dávila). Y también nos inspira saberte digna y fuerte sin que la tortura melle tu espíritu. Un abrazo que traspase barrotes, amiga», escribió en un tuit.
Victoria Cárdenas, esposa del preso político Juan Sebastián Chamorro, también se sumó a la demanda de los parientes de Dávila. «Que cese el aislamiento y la incomunicación. Tamara debe reunirse con su hija y el resto de su familia», apuntó.
Por su parte, Elvira Cuadra, socióloga nicaragüense, lamentó el deterioro físico que presenta la rea de conciencia y señaló que la «tortura y crueldad», es el trato que reciben las personas presas políticas en Nicaragua.
Tamara Dávila fue detenida el 12 de junio de 2021. La dictadura de Nicaragua decidió encarcelar a la opositora por supuestamente violar la Ley 1055 o Ley de Soberanía. La acusó y condenó a ocho años de prisión por el supuesto delito de «conspiración para el menoscabo de la integridad nacional» y «traición a la patria».
Este lunes, la rehén de la dictadura cumple 394 días encerrada y aislada en las celdas del Complejo Policial Evaristo Vásquez, conocidas como «El Nuevo Chipote» en Managua. Solo en ocho ocasiones ha podido ser visitada por sus familiares.