La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo continúa con su embestida contra el periodismo independiente en Nicaragua. El régimen continúa con sus detenciones arbitrarias, la más reciente contra dos conductores del diario La Prensa, quienes fueron arrestados por oficiales de la Policía, denunció el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
Fuentes Confiables reveló que los trabajadores detenidos son Carlos Lam y Mario Sánchez. Los «secuestros» ocurrieron entre la noche del seis de julio, y la madrugada de este jueves, siete, cuando la Policía orteguista allanó sus viviendas.
La dirección ejecutiva del medio de comunicación aún no se pronuncia sobre esta nueva arremetida del régimen y hasta el momento se desconoce los motivos de la detención. Los detenidos trasladaron al equipo periodístico que dio cobertura a la expulsión de las Misioneras de la Caridad.
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Además, Expediente Público informó que la casa de la exsecretaria del jefe de prensa, Eduardo Enríquez, y de un fotógrafo, también fueron allanadas. De los dos tampoco se sabe su paradero.
El pasado 13 de agosto de 2021, el régimen de Ortega ordenó el «asalto» contra el diario más antiguo del país y abrió una investigación por supuesta defraudación aduanera, lavado de dinero, bienes y activos.
El allanamiento ocurrió un día después de que el medio periodístico anunciara la suspensión de su edición impresa debido a que la dictadura de Daniel Ortega, a través de la Dirección General de Servicios Aduaneros, mantiene retenido su papel.
También, Juan Lorenzo Holmann, gerente general de La Prensa, fue detenido en esa embestida por los supuestos delitos de «defraudación aduanera» y «lavado de dinero». El 23 de marzo de 2022, la jueza Nidia Camila Tardencilla Rodríguez lo condenó a nueve años de prisión.
El Cenidh le demandó al régimen de Ortega la libertad inmediata de los conductores del periódico y «el cese de la persecución y amenazas a los demás integrantes del equipo que ejerciendo su trabajo el día de ayer fueron hostigados junto a sus familias en sus propias casas».
