El crítico de la dictadura Yader Morazán, exfuncionario del Poder Judicial, criticó la expulsión de las Misioneras Hermanas de la Caridad por parte de la dictadura Ortega-Murillo. Explicó que «una cosa es cancelar las personalidades jurídicas de las ONG y otra muy distinta deportar sin proceso legal al personal que ahí laboraba».
Morazán señaló que esta acción, del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo «no sucede en ningún país civilizado, ni aún saltándote la barda fronteriza de forma irregular. Embajadores, ¡reaccionen!».
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Las Hermanas de la Caridad fueron expulsadas de Nicaragua ayer, seis de julio, por la dictadura Ortega-Murillo. Un microbús con las religiosas en el interior fue escoltado desde su sede en Granada hasta la frontera terrestre con Costa Rica. Ahí las religiosas fueron recibidas por sacerdotes de la Diócesis de Tilarán, Liberia.
El Título XV de la Ley 761, Ley General de Migración Extranjería, sobre deportación, expulsión y extradición, establece en el artículo 171 siete causales para aplicar cualquiera de esas figuras a los extranjeros que se encuentren en el país, ninguna de ellas aplicaría a las Misioneras de la Caridad.
Los puntos seis y siete del artículo 171 señala como causal de deportación o expulsión «constituir un peligro para la seguridad ciudadana y el orden público y por vagancia habitual previamente demostrada».
El artículo 173 explica que todo acto de deportación «deberá efectuarse a través de Resoluciones Administrativas debidamente fundamentadas», situación que no sucedió con las Hermanas Misioneras de la Caridad, al menos públicamente no se conoció de ningún documento que se refiera a la expulsión de las religiosas.
Desde que fue anunciada la cancelación de la personalidad jurídica de la Asociación Misioneras de la Caridad, las religiosas de la orden creada por Madre Teresa de Calcuta vivieron «momentos difíciles, de zozobra, de angustia, temerosas de su integridad física», informó monseñor Manuel Eugenio Salazar, obispo de la Diócesis de Tilarán en Liberia, Costa Rica.
«Estaban con mucha preocupación hasta que llegaron a territorio costarricense. Si por ellas hubiera sido se quedan en Nicaragua, aman a Nicaragua, aman al pueblo nicaragüense, especialmente a los más pobres y necesitados», dijo el obispo en un video divulgado en sus redes sociales.
El sacerdote Edwing Román, antiguo párroco de la iglesia San Miguel Arcángel de Masaya, calificó de «bestia» al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo tras la expulsión de Nicaragua a las hermanas de la Asociación Misioneras de la Caridad.
A través de su cuenta de Twitter, el religioso publicó una foto de la Santa Madre Teresa de Calcuta con la princesa Diana e indicó, a través de un paralelismo, que «mientras una dama la acogía y la admiraba, en Nicaragua una bestia la expulsaría».
Monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, cuestionó que la «prédica de amor» de la que se ufana la dictadura de Daniel Ortega quedó «lejos» de los hechos, tras expulsar a las hermanas de la Asociación Misioneras de la Caridad.
«Si es verdad que “el amor perfecto expulsa el temor” (1 Jn 4,18), también es verdad que el temor mezquino expulsa el amor», expresó el religioso a través de su cuenta de Twitter.