La Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) instó a los presidentes de los estados miembros del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) a que no respalden al candidato propuesto por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo para ocupar la Secretaría General del organismo, debido a que esa decisión «representaría una amenaza a la estabilidad regional».
En una nota de prensa, el bloque opositor informó que han expuesto, ante los estados miembros del SICA, «su posición» ante la terna presentada por el régimen de Ortega para ocupar el alto cargo administrativo de la instancia, que después de tres intentos fallidos la dictadura de Nicaragua alcanzó más simpatía con la postulación de Werner Vargas, exdirector Ejecutivo del SICA (2014-2020); Myriam Vásquez y Claudio Arana.
«En su comunicación a los presidentes, la Unidad Nacional, refiere que el Gobierno ilegítimo de Ortega ha establecido un modelo de estado policíaco y autoritario, comete sistemáticas violaciones a los Derechos Humanos, ha desmantelado la institucionalidad democrática y en el plano internacional se ha alineado con la política guerrerista de Rusia», aseguró la organización política.
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Además, indicó «que el régimen de los Ortega-Murillo es contrario a la paz, la libertad y la democracia, valores sobre los que se funda el SICA. Por ello, señala que un respaldo al candidato propuesto por Nicaragua resultaría contraproducente al espíritu y a los objetivos constitutivos de la integración regional».
La Unab alegó que el apoyo al candidato de la dictadura de Nicaragua en el cargo administrativo más relevante del SICA, «representaría una amenaza a la estabilidad regional» y por lo tanto, la agrupación opositora se suma a los líderes políticos nicaragüenses e internacionales, quienes han rechazado el consenso que hubo en el Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores del SICA, en donde los cancilleres de la región apuestan por otorgarle la Secretaría General del organismo al cuarto candidato propuesto por la administración de Daniel Ortega.
La exdiputada y economista Edipcia Dubón, en entrevista para el podcast AHORA de Artículo 66, calificó como «un error» que los países miembros del SICA «en un momento de fragilidad institucional y de deterioro de las condiciones económicas y sociales apostar a que encabece las decisiones de la región el gobierno que es el más excluido, por las mismas decisiones que ha tomado el gobierno de Ortega al permanecer de forma ilegítima en el poder».
De igual forma, la expresidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, sostuvo que entregar el más alto cargo administrativo del SICA a un funcionario de Daniel Ortega es «una bofetada a las víctimas de la represión».
«Imposible cerrar los ojos ante esta advertencia. Dar la Secretaría general del SICA a Nicaragua es dar una bofetada a las víctimas de la represión y dar más poder al país que ha alterado el balance militar en Centroamérica y que ha aplaudido el horror de Rusia en Ucrania», manifestó la exmandataria en su cuenta de Twitter.
