El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, monseñor Silvio José Báez, expresó su «cercanía fraterna y oración» a monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis Estelí, ante el cierre del canal TV Merced, acción que catalogó como una «nueva injusticia sufrida».
El purpurado citó la segunda epístola a Timoteo, capítulo 2, versículo 9: «La palabra de Dios no está encadenada». TV Merced es el tercer canal religioso que ordena cerrar la dictadura de Nicaragua y el segundo bajo la administración de la Iglesia católica. El 20 de mayo sacó de la grilla de los canales por cable al Canal Católico de Nicaragua.
El 27 de junio se conoció que el régimen de Daniel Ortega, a través del Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones (Telcor), ordenó sacar de la parrilla de programación de la empresa Telecable la señal de TV Merced, el canal católico de la Diócesis de Matagalpa que dirige monseñor Álvarez.
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«Al mediodía del lunes 27 de junio de 2022, hemos sido notificados por la gerencia de Telecable, que por orientaciones de Telcor, TV Merced, canal católico de la Diócesis de Matagalpa, es eliminado de la parrilla de programación de dicha empresa en Matagalpa y Jinotega», explica un comunicado emitido por la dirección ejecutiva del medio de comunicación.
En el documento, TV Merced recordó que desde su fundación, el 8 de septiembre de 2013, ha acompañado la misión pastoral de la Iglesia Diocesana, llevando el mensaje del Señor, «así como consuelo y esperanza a los ancianos, enfermos y pueblo fiel de Dios que peregrina en nuestra iglesia particular».
Aunque el medio ya no transmitirá su programación en señal abierta, animó a las personas a seguirlo acompañando a través de sus redes sociales y canal de Youtube: Diócesis Media TV Merced.
«Además está a disposición de ustedes nuestras 24 horas de programación en la página web de la Diócesis de Matagalpa, sección de televisión y en la plataforma Twich donde nos encuentras escribiendo en el buscador: tvmerced1», alentó.
En los últimos meses la dictadura de Ortega ha emprendido una persecución contra la Iglesia católica y sus principales líderes. A inicios de mayo la Policía había iniciado una ola de asedio contra los sacerdotes, entre ellos está el padre Harving Padilla, párroco de la iglesia San Juan Bautista de Masaya, el padre Uriel Vallejos, párroco en Sébaco, Matagalpa, así como del mismo monseñor Rolando Álvarez, este último se tuvo que refugiar en un templo de Managua tras varios días de persecución de la Policía.