El vicario general de la Arquidiócesis de Managua, monseñor Carlos Avilés, denunció ante en la prensa católica internacional que la salida del aire del Canal Católico de Nicaragua es una medida implementada por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo para silenciar a la Iglesia nicaragüense.
“Este canal (Canal Católico de Nicaragua) se solidarizó con monseñor Rolando (Álvarez), que es su director. Entonces el gobierno mandó a cerrar(lo). La Conferencia Episcopal está sorprendida, no ha dicho nada pero ciertamente es un golpe más del gobierno en represión a la Iglesia”, dijo Avilés en declaraciones al periodista español Rodrigo Moreno Quicios, de la agencia de noticias Rome Reports con sede en Roma.
Avilés es uno de los pocos obispos que siguen concediendo entrevistas a los medios de comunicación nacionales y extranjeros para denunciar la situación de persecución religiosa que vive la Iglesia bajo la dictadura orteguista.
El religioso manifestó también que la Iglesia está viviendo la represión del régimen de Managua por estar del lado del pueblo nicaragüense.
“La Iglesia, gracias a Dios, refleja lo que está viviendo el pueblo. No tenemos ningún privilegio, no tenemos ningún poder y estamos sufriendo lo que está sufriendo el pueblo”, explicó el también párroco de la iglesia Santo Cristo de Las Colinas de Managua.
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Recientemente, Avilés señaló en medios católicos de España el incremento del hostigamiento contra la Iglesia por parte del orteguismo, que se ha traducido en espionaje contra las acciones pastorales que desarrollan obispos, sacerdotes y religiosas en las parroquias de Nicaragua.
“Son muchos casos de acoso al clero. Grabaciones de homilías, infiltrar gente en las comunidades. Yo le puedo decir que en el catecismo de confirmación y primera comunión infiltran gente para ver que es lo que estamos enseñando. En las homilías, como 40 o 50 homilías revisan cada semana a ver que es lo que decimos, que es lo que predicamos”, detalló el religioso al periodista Josué Villalón en Radio María España.
«Nos sentimos solos»
Monseñor Avilés explicó en Rome Reports que la Iglesia católica nicaragüense es la única institución dentro del país que está denunciando las violaciones a los derechos humanos y realizó un llamado para que otros organismos internacionales puedan alzar su voz por el pueblo de Nicaragua.
“Del resto del mundo esperamos como nicaragüenses la solidaridad porque nos sentimos solos. No sentimos que ninguna autoridad internacional esté velando por el pueblo (nicaragüense)”, lamentó el sacerdote.
